Omegas en fuga

Capítulo 1

CAPITULO 1: LA FUGA

Horas antes.

En Gusu organizaron una pequeña celebración para festejar el nacimiento del hijo del viejo Lan Qiren, quien afortunadamente despues de cientos de años de vivir amargado por no conocer a su alma gemela; finalmente se aliviano tanta amargura, y ese pensamiento obviamente Wei Wuxian no se lo iba a guardar para él o para su amado alfa.

— Ya era hora tío suegro, un poco más y hubieras muerto de tanta amargura que tenías.

Uno que otro discipulo se río ante las ocurrencias del esposo del segundo jade, Lan Wangji quien solo le dedico una mirada reprobatoria; milagrosamente, el omega Wei esperaba el regaño del viejo Lan Qiren, no hubo nada, ni un bufido; ni una queja o algo por el estilo. Sintio raro por lo que se dispuso a reir, hablar y beber vino; algo que permitio solo por esa noche el maestro Lan.

"El viejo cambio, el poder del amor." pensó viendo como el anciano jugaba con el pequeño cachorro en los brazos de su omega, la que conocío en un banquete de los Jin; una sirvienta bastante bella. El omega solto un bufido, el viejo Qiren siempre suele quejarse que él; solo por ser un sirviente de un prestigioso clan no debía casarce con su preciado segundo sobrino.

¿La vida o Dios le habian castigado por ser tan descriminativo? ¿O simplemente fue el destino? Bufó de nuevo molesto, se marchó del banquete para no volver a decir palabras groseras en una celebración que debía ser feliz.

— Wei Ying.

La voz de su alfa llego a sus oidos haciendo sentir feliz y gustoso a su omega, pero sabía muy bien porque su amado Lan Zhan se habia salido de la fiesta a buscarlo; con una sonrisa en el rostro volvio a ver el cielo.

— Lan Zhan, mi amado alfa, el dueño de mis muertitos, padre de mis cachorros. ¿Puedes decirme para que buscas a este omega de baja cuna? — alzó la botella de licor.

Queriendo decir sin mencionar palabras "Ahora no, ando borracho y puedo decir cualquier pendejad*, por eso, alfa mio, ve a dentro y espera.", su mente le estaba matando por lo que era mejor no hablar.

Ignorando sus palabras - no dichas, ojo con eso -, Wangji se sentó a su lado viendo a su omega con las mejillas rosadas debido a la borrachera, su cabello azabache despeinado y la mirada nublada y perdida.

— ¿Por qué dijiste eso frente a mi tió? — su voz era suave, para no alarmar a su amado omega.

Wangji libero sus feromonas para que su alma gemela se sintiese comodo con él.

Wei Wuxian rió.

— No lo sé, solo se me salio. — rió un poco.

Wanji suspiró.

— No debes decir esas cosas, se más educado. — el omega frente a él se detuvo de golpe y el silencio que lo envolvio en ese momento le puso nervioso — ¿Wei Ying?

— ¿También crees que me falta educación? — su voz sonaba herida.

Wangji lo atrajo hacia él rapido, acunando su rostro en sus manos bajo la luz de la luna, unas cristalinas lagrimas se asomaban en sus ojos grises.

— Solo dije que debias ser educado. — volvió a decir.

Wei Wuxian se alejó de su alfa y con toda la sobriedad que habia recuperado se puso de pie y entró a receso en las nubes.

Alfa tonto. Pensó Wei Wuxian muy a sus adentros.

[...]

Cuando Lan Wangji abrió los ojos al no sentir a su omega a su lado, y al buscar rastros del aroma de su alma gemela entro en pánico al no encontrar nada; rapidamente se vistió y busco por todo Receso en las nubes, hasta que se topo con su cachorro, Lan Sizhui percibió el aroma agitado de su padre y fue hacia él.