15.

5.9K 370 95
                                    

Mi cara de confusión se hizo presente y al mismo tiempo sentía asco y desprecio hacia él.

— Liv —Dijo mi padre viéndome sin pestañear dando un paso adelante a lo que yo de inmediato me eché para atrás, vi como su rostro se volvió triste al ver mi reacción—  Pero mira cuánto has crecido —.

— ¿A que has venido? —Pregunté cruzándome de brazos frunciendo el ceño—.

— Supe lo de Heidi —Sentí un nudo en la garganta desviando la mirada por un segundo, asentí sin decir nada obligándome a no llorar— Está por todos lados su nombre como era costumbre, solo que ahora no es por anunciar sus diseños —.

Mi mente se llenó de todas esas veces que mamá salió en la televisión cuando empezó a ganar fama gracias a sus conjuntos y sonreí dejando de escuchar por un momento lo que mi padre decía.

— Necesitaba saber si estabas bien —Rodé los ojos riéndome incrédula, ahora si quiere saber cómo estoy—.

— Estoy bien, siempre lo he estado —Dije cortante para que supiera que no lo necesito— ¿Como supiste que esta es nuestra casa? —.

— Llamé a tu abuela para que me diera la dirección —No creí nada de lo que dijo, mi abuela jamás le diría donde vivimos— ¿Puedo pasar? Quería hablar contigo sobre algo —.

— Puedes decírmelo aquí —Contesté aún seria, que no crea que voy a recibirlo con los brazos abiertos después de no saber de él en años—.

— Está bien —Hizo una pausa rascándose la cabeza— Me encantaría que vinieras a vivir conmigo Liv —.

— ¿Qué? —Dije sin creer lo que mis oídos escuchaban, tiene que ser una broma—.

— Quiero que vengas a vivir conmigo y con Marissa —Explicó sonriendo como si me acabara de decir la mejor noticia del mundo— No puedes quedarte sola aquí —.

— ¿Que te hace creer que me iré contigo después de todo lo que nos hiciste? —Contesté molesta subiendo el tono de voz y automáticamente creando una barrera entre nosotros— ¡Ahora si te importo! —.

Vi como tragaba saliva sorprendido por mis palabras, estoy segura que no pensó en que podría defenderme yo sola y no caería en sus intenciones.

— Liv por favor yo... —Se acercó a mi dando unos cuantos pasos pero me quité rápidamente tomando la puerta para cerrarla en su cara por si se atrevía a acercarse de nuevo— ¡Tienes que escucharme! —.

— ¡Vete! —Respondí furiosa queriendo abalanzarme sobre él y golpearlo por todo el coraje que sentía—.

Vi cómo su mirada se clavó en algo detrás de mi y rápidamente dejó de gritar, volteé encontrándome a Tom caminando hacia mi con el ceño fruncido sin despegar la vista de mi padre, gracias al cielo nuestros gritos lo habían despertado.

— ¿Que está pasando Olivia? —Preguntó parándose detrás mío tomando mi hombro, me sentí aliviada de tenerlo cerca porque de ser necesario él me defendería sin pensarlo—.

— ¿Él es tu novio? —Dijo mi padre señalándolo con el dedo sin dejar de mirarme— ¿Ahora vives aquí con él? —.

Cuando estaba apunto de contestar, Tom caminó hacia él parándose esta vez frente a mi como si se tratara de un escudo.

— Soy su padrastro, Heidi era mi esposa y es mejor que te vayas —Dijo cruzándose de brazos sólo dejándome ver su espalda, mi padre se rió burlándose en su cara—.

— ¿Quien te crees para darme órdenes? —Vi como todo su cuerpo se tensó y bajo los brazos formando puños con sus manos, esto se va poner feo—.

— No tengo por qué darte explicaciones a ti —Tom estaba realmente molesto se escucha en su voz, lo tomé suavemente del brazo cerrando los ojos tratando de que se calmara un poco— Y ella ya te dijo que te fueras así que no se qué haces aquí todavía —.

— Debes irte papá —Dije aún escondida detrás de él, rogando que ya se fuera de una vez por todas— Tom es quien me cuidará ahora, mamá lo habría querido así —.

Sin decir nada se dio la vuelta dejándonos solos y salió finalmente, sentí que volví a respirar cuando la puerta se cerró y sin pensar abracé a Tom por la espalda, rápidamente giró su cuerpo para quedar frente a mi y me abrazó dándome una paz que nunca había sentido.

— ¿Estás bien? —Susurró besando mi frente con delicadeza sujetándome fuerte como si fuera a correr en cuanto me soltara de su agarre—.

— Si, estoy bien —Dije asintiendo con un lado de mi cara pegada a su pecho oliendo su perfume— Gracias por defenderme —.

— No hay nada que no haría por ti Olivia —Sentí mi corazón latiendo a mil por hora, Dios, es tan tierno, sonreí avergonzada apretándolo un poco más fuerte y cerré los ojos deseando que este momento durara para siempre— Tú eres mi prioridad ahora —.

Levanté la cabeza encontrándome ya con su mirada clavada en mi, veía sus ojos cafés tan lindos que parecían brillar por solo verme, me acerqué dejando un beso en su mejilla para luego volver a mi posición anterior, me miró sonriendo y después se relamió sus labios viendo los míos, quería besarlo pero mi corazón me decía que no era correcto.

Sin embargo él se acercó esta vez y antes de que pudiera reaccionar me besó dulcemente, cerré los ojos casi agradeciendo por sentir sus labios otra vez pero rápido me separé juntando mi frente con la suya.

— Tom —Me solté de su agarre dando un paso hacia atrás para poder verlo mejor— Lo siento no puedo hacerlo —.

— Lo sé —Dijo agachando la mirada avergonzado, no quería que se sintiera mal por besarme cuando la verdad era que yo moría por hacerlo— Lo siento, no quiero que las cosas se pongan raras entre nosotros —.

— No será así —Dije sonriéndole ampliamente a lo que él me sonrió de vuelta dejándome ver sus dientes— ¿Comemos algo? —.

<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<

Pasaron un par semanas y por fin comenzaba a sentirme bien, estaba comiendo como debería, salí con Lucia un par de veces incluso habíamos vuelto a tener pijamadas, no había visto a Matt ya que se fue unos días a un campamento y saldríamos una vez que regresara. Lo extrañaba mucho, él siempre me hacía sentir mejor cuando estaba triste por eso amaba que fuera mi mejor amigo.

Por otro lado Tom no se la estaba pasando nada bien, seguía llorando por las noches y casi todos los días se iba de fiesta llegando muy ebrio a casa incluso una ocasión ni siquiera llegó a dormir. Sé que no debe ser fácil para él superar algo así pero no podemos pasar toda la vida sin cambiar de página estancados en la tristeza, traté de hablar con él repetidas veces pero solo duraba bien unos días.

Me dolía mucho verlo así, tenía que hacerlo cambiar de actitud  por su propio bien.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Ojalá les guste, voten y comenten que les parece<3

𝒟𝒶𝒹𝒹𝓎  {Tom Kaulitz}Where stories live. Discover now