40.

2.5K 169 50
                                    

Más o menos treinta minutos después me dirigía al bar donde sería la dichosa fiesta, no puedo negar que todo el camino me sentí tensa, por mas que quería evitarlo aún no asimilaba ver a Tom después de tanto tiempo y no sentir nada, era raro pero un raro normal, no se como explicarlo.

Me acerqué a la entrada y luego de intercambiar algunas palabras con el cadenero me dejó pasar sin problema.

Sentía las miradas de ciertas personas al verme caminar por el lugar y de inmediato me sentí insegura de llevar puesto el maldito vestido que Alexa escogió, sabía que era demasiado para la ocasión pero ya estaba aquí y no había manera de cambiarlo.

Respiré hondo para intentar tranquilizarme y volver a sentirme relajada llenando mis pulmones de aire completamente invadido por el olor a cigarrillo que me hacía recordar a Andrew.

Gracias al cielo mañana vendrá a visitarme.

— ¡Liv! —.

Escuché una voz femenina llamando mi atención de inmediato, volteé a todos lados hasta encontrarme con Ana una chica de la agencia que era parte del staff y muy buena amiga de mamá a pesar de ser mucho más joven, solo me llevaba un par de años de diferencia.

— ¡Ven con nosotras! —Gritó de nuevo para que pudiera escuchar su voz por encima de la música tan alta que inundaba el lugar—.

Sonreí acercándome mientras me abría paso entre la gente a su vez que recibía piropos de algunos hombres que fácil me doblaban la edad, los ignoré por completo pasando de largo sabiendo que probablemente estaban ahogados en alcohol y no eran conscientes de las barbaridades que salían de sus bocas.

— Hola guapa —Saludó Ana inclinando su cuerpo hacia adelante para abrazarme mientras seguía sentada en la barra junto a una chica— Ella es Sofía, mi roomie —.

— Olivia ¿verdad? —Dijo Sofía dándome un ligero abrazo, sonreí mirando que llevaba un piercing en su nariz y otro en la ceja junto con un montón de tatuajes en los brazos—.

— Solo Liv, un placer —Contesté acercándome a tomar asiento junto a ellas haciéndole señas al chico para pedirle que me hiciera una bebida—.

Miré a mi al rededor mientras le daba un sorbo a mi vaso, fruncí el ceño al darme cuenta del ambiente que este lugar tenía, no parecía un bar común como a los que solía ir, a demás que no lograba ver a nadie más de la agencia más que nosotras y se supone que aquí nos veríamos todos.

— ¿No vendrán los demás? —Pregunté inquieta dándole otro sorbo a mi bebida, pasando mi pierna por encima de la otra dejando ver más piel de la que me gustaba mostrar—.

— No tardaran mucho en llegar —.

Dijo Ana restándole importancia alzando los hombros, antes de que pudiera contestar miró a Sofía sonriente y la tomó de la mano bajando ambas de su asiento.

— Vamos a bailar, ¿vienes? —Preguntó ofreciéndome su mano mirándome de arriba a abajo detenidamente—.

— Claro —Tomé la mano de Sofía dejando el vaso de la bebida ya vacío sobre la barra y juntas nos dirigimos a la pista—.

Enseguida comencé a moverme al ritmo de la música llevando mis brazos hacia arriba para dejarlos caer sobre si cabello mientras balanceaba mis caderas de un lado a otro, dejando ver mis curvas a la perfección.

Cuando venía hacia acá no pretendía llamar la atención pero solo bastó un trago de alcohol para hacerme cambiar de opinión fácilmente dejándome llevar por la música recorriendo mi cuerpo.

Sentí como Sofía pasaba sus manos a mis caderas pegándome hacia ella suavemente, sonreí acercándome poniendo mi brazo por su encima de su hombro mientras que Ana bailaba detrás suyo moviéndose sensualmente, igual que todas las chicas que estábamos en la pista.

𝒟𝒶𝒹𝒹𝓎  {Tom Kaulitz}Onde histórias criam vida. Descubra agora