Una charla y una batalla [19]

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Notas: Recordemos que en el capitulo pasado, Cale estaba hablando de incluso tener hijos, pero en este capitulo esta algo sorprendido de su charla con Penelope. Simplemente no se ha dado cuenta porque no se lo plantea directamente como en este capitulo. 

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—¡Padre! ¡Padre, he escuchado cosas terribles!— El duque Eckhart dejo lo que estaba haciendo para prestarle atención a su hija. Ojos llorosos y voz quebrada, Yvonne corrió a su lado desde la puerta, lo abrazo mientras lloraba con amargura.

—Yvonne ¿Qué pasa? ¿Qué es eso que has oído que te ha afectado tanto?

—Padre, padre, escuche a uno de los comerciantes del reino Roan hablando con otro en el mercado, sabes que fui a tomarme las medidas para mi vestido de novia, lo que escuche fue horrible, padre—

Yvonne apenas podía hablar claramente en medio de todo el llanto.

—¡Ni siquiera volvi al palacio despues de escuchar tales cosas! ¡He venido directamente a ti para contarte!

—Yvonne, hija, respira y cuentale a tu padre que es lo que te atormenta— EL duque pidió poniendose serio ¿Que había escuchado su preciosa hija para estar en ese estado?

—El comerciante dijo que el reino Roan ha estado en guerra, sabes eso ¿Verdad?—

—Si, lo se—

—Padre ¿Has intentado contactar con la hermana Penelope? Padre, se que Penelope y yo no estabamos en buenos terminos antes de que se fuera, pero padre sabe que nunca la he odiado.

¿Malos terminos? El duque casi hace una mueca, Penelope intento activamente deshacerse de Yvonne: Intento envenenarla, la empujo de las escaleras, incluso intento incendiar su habitación con Yvonne dentro. Yvonne había suplicado por su vida de rodillas para que no fuera ejecutada, fue así como el principe heredero decidió mandarla al exilio en un matrimonio con un noble extranjero.

El duque había intentado llamarla unas pocas veces con el dispositivo de comunicación, pero jamas hubo respuesta, las cartas tampoco fueron respondidas.

Una parte de él se había inquietado, le exigía al menos ver la cara de Penelope una vez, que viajara al reino Roan y confirmara su bienestar con sus propios ojos, pero cuando parecía que finalmente haría eso, Yvonne lo visitaría y el pensamiento de ir sería... olvidado. Como si no pudiera controlarse a si mismo y cediera a lo que su hija pidiera.

Era como no tener control sobre si mismo, y al mismo tiempo no se daba cuenta de eso.

—¿Penelope-? No, no la he llamado ¿Supiste algo de ella?— La vio, la batalla por la tortuga dorada, vio la grabación una vez que pudo obtenerla gracias al principe imperial Adin, quien la mando al palacio de Eorka y a su vez, a él.

—Padre, estan diciendo que ella esta siendo maltratada por su esposo— Yvonne dijo, la voz quebrada por el llanto —Dijeron que su esposo es un alcoholico que la llevo a un pueblo lejano con pocos sirvientes, que la golpea y abusa de ella. Padre, la hermana Penelope no tiene entrenamiento en magia ¡Pero su esposo la lleva con él a campos de batalla! ¿Sabes como estuvo durante la batalla para defender el patrimonio de sus suegros? La hermana tosio tanta sangre...

Yvonne lloro un poco, cubriendo su rostro con sus manos antes de mirar a su padre, lagrimas apegandose a sus largas pestañas rosas.

—Padre ¡No podemos dejar a la hermana Penelope sola! La hermana Penelope... Entiendo que ella no se sintiera feliz cuando regrese, pero jamas le he guardado rencor, padre, por favor, hablare con su alteza, lo convencere para que la deje regresar. Padre, hay que apoyarla, por favor, inicia el proceso de divorcio para mi hermana. El comerciante dijo que picaban sus brazos con agujas, que le servían comida podrida, la dejaban varios días encerrada en su habitación sin comer y que los sirvientes le hacían bromas.

La Perra Loca y La Basura de la FamiliaWhere stories live. Discover now