La Perra Loca y La Basura de la Familia

La Perra Loca (3)

Notas: 

Lo escrito entre <> es que estan hablando coreano. 

Cha Siyeon tuvo un mal día, una mala semana, un terrible año, una vida desastrosa.

Primero perdió a su madre, paso a vivir con su padre y medios hermanos que la odiaban, luego pudo salir de ahí ¡Enhorabuena!

Descubrió que tenía cancer de estomago ¡Enhoramala!

Las cosas se fueron en picada desde ahí, fue hospitalizada, sus hermanos llegaron a verla y hasta donde le dijeron, su padre fue a buscar un medico al extranjero para ella. A Siyeon no podía importarle menos

Ellos le causaron esto.

Debieron darse cuenta del aura de muerte de Siyeon hacia ellos, porque no buscaron molestarla mas de lo necesario, aun estarían ahí, hablarían con los medicos, le traerían de comer. Cuando estuvo demasiado debil para caminar, ellos la sacarían en silla de ruedas para que recibiera luz solar y aire fresco.

Siyeon los escuchaba cuando fingía dormir, lloraban lo mas silencioso posible y se disculpaban con ella.

'¿Por qué hicieron eso?' Quería enfrentarlos '¿Por qué simplemente no fueron amables?' Quiza en el pasado, Siyeon los hubiera perdonado, ahora no estaba tan segura.

Su padre regreso un día antes de que la sometieran a un coma inducido, el medico extranjero le dijo a ella que no tenía muchas esperanzas para extirpar el tumor, pero que podría haber una pequeña oportunidad para ella.

Siyeon vio por ultima vez a su familia, sin saberlo, escucho sus promesas de enmendar las cosas cuando volviera a despertar, alcanzo a sentir a su padre besar su frente y a sus hermanos apretar sus manos antes de caer en un sueño profundo.

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Sorpresa, transmigro al maldito juego que había estado jugando antes de caer dormida: Proyecto de amor: La hija del duque.

Como la villana del juego, Penelope Eckhart.

Ella podría lidiar con esto, ella lidiaría con esto, con ayuda de este sistema de juego. Así que jugo, escogió sus opciones, desbloqueo otras, mejoro sus relaciones y todo estuvo bien.

Siyeon se enamoro. Le conto la verdad a Callisto y él le dijo que le creía, Penelope estaba dispuesta a quedarse en este mundo y dejar atras la vida en la que ya no le quedaba nada.

—No me importa si eres Penélope Eckart o no—.

—Por qué...— Saco las palabras de mi garganta seca. —¿Por qué... por qué lo dices ahora? Dijiste que era una palabra ingenua que no nos conviene. Dijiste que es solo un juego estúpido con las emociones...— Fue muy fácil apagar las brasas débiles que era como una fiebre leve.

—Dijiste que era solo una ilusión. Entonces, rápidamente lo rechacé porque no quería equivocarme...—

—...—

—¿Pero por qué estás haciendo esto ahora?—

—... Lo siento. No podría decírtelo entonces— El Príncipe Heredero habló con calma, sin dejar de mirarme. —Tenía miedo.—

—¿...Qué?—

—El emperador también dijo que amaba a mi madre—

—...—

—Mi madre fue engañada por las palabras y se lo dejó todo al príncipe, que había sido privado de su herencia, familia y pode ¿Cómo podría haber sabido que traería una concubina tan pronto como ella muriera porque ella había pasado por todo tipo de dificultades y lo convirtió en emperador?— Calisto rió amargamente —Siempre me han lavado el cerebro para desconfiar de los demás y estar en guardia contra los sentimientos temporales. Entonces... —Decidí que una relación contractual sería mejor que una con sentimientos superficiales. Y cuando dejo salir todos los sentimientos que he estado sintiendo... Entonces pensé que tendría un final contigo ¿Por qué pones una cara tan fea?— Cuando Calisto le vio así, sonrió levemente y acarició la mejilla.