— Entonces, los ruidos de anoche, ¿es porque sufres de insomnio?.
— Por supuesto.
— ¿Incluso los que se escuchaban como "Aah, mhn"?.
— Cabeza de algodón.– llamo el joven rubio ceniza–. Cállate y come.
Ashido observó a su amigo, después al muchacho que tenía al frente. Ambos tenían cuello de tortuga, últimamente eran más cercanos -la tomaban por loca, pero estaba segura que así era-, y por las noches veía la silueta de su amigo escabullirse entre pasillos. Había gato encerrado, ¿O cómo dicen?.
Alzó los hombros junto a un pequeño "uhm", tomo sus palillos y termino su desayuno.
Esa noche invitaría a las chicas y haría que le creyeran y dejarán de tomarla como loca.
"¿Ya tomaste tus pastillas, amiga?". Fue lo que le dijeron la última vez.
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— ¿Estás bien?. ¿Seguro que no te molesta hacer esto todas las noches?. Sabes que puedo pasarlo solo..
— Ya te dije que está bien, idiota. Ahora déjame pasar.– empujó a Shoto no muy fuerte. Solo haciendo espacio para poder pasar.
El joven de cabellos bicolor suspiro y dió un último vistazo al exterior antes de cerrar la puerta de su habitación. Juraba haber visto algo justo a la vuelta de aquella pared, sin embargo, dejaría pasarlo solo está ocasión. La próxima vez si haría algo al respecto, odiaba ese tipo de situaciones.
— Oye.– llamo su pareja.
— ¿Si?.– respondió quitando su camisa, listo para dormir. Ya había cerrado la puerta.
— ¿Quieres que te la chupe?.– sonrió.
El más alto detuvo sus movimientos por la sorpresa. Es verdad que su pareja era un joven impredecible. Pero, eso no le molestaba, al contrario, le fue tomando gusto con el pasar de su relación.
Soltó una pequeña risa y nego.
— Está vez no.– se abrió espacio en la cama–. Y tú tienes que dormir, despertaste bastante temprano hoy.– beso los cabellos rubios de su novio y lo acurrucó en su pecho.
Katsuki apretó los labios y frunció las cejas. Alzó la mirada, notando solo la barbilla de Shoto, al bajar de nuevo, se encontró con el pecho del más alto. Sabía que el propósito de esto era solo dormir pero, ¿estaría mal querer solo hacer un poco?.
Mmm.
— Amor.– susurro.
Pudo notar y escuchar el repentino cambio en sus latidos.
— Shoto, cariño.– colocó su mano sobre el pecho del antes mencionado.
— Kats, no.– tomo la muñeca del rubio, impidiendo que siguiera con sus toques.
— ¿Y por qué no?. Te gusta, lo sé.– paso su lengua por la barbilla del más alto.
— Te lo digo en serio, y no voy a repetirlo. Cierra los ojos, y duerme ahora.
Pudo notar que está vez si hablaba serio. La manera en que le dió aquella mirada y la forma en que apretó la mandíbula lo fue todo.
— Tsk.
Se aguanto aquel malestar que le provocó esa llamada de atención, y soltando su muñeca, dió media vuelta. No quería verlo al rostro.
Dirán que puede ser infantil sus actitud pero, así como ven a Katsuki como un perro rabioso, tiene corazón de pollo. Aunque no parezca, algunas cosas le afectan.
En ocasiones Jiro y el resto de la Bakusquad se burlan de él porque, así como las chicas se ponen más sentimentales e irritables ciertos días de cada mes, él también lo hace. Es extraño y, realmente divertido para ellos.
No sería para aquellos que, con una simple mirada terminan con un ojo morado o algún rasguño y sangre en su piel, pero sí para sus amigos quienes ya se han acostumbrado.
Con decir que tuvieron que separar a Mina y Katsuki un día debido a un pleito de ambos. Katsuki iba a comer una manzana, pero Ashido quería esa manzana. Son cosas pequeñas que pueden llevar a un gran problema.
Shoto, Momo y Eijiro son los únicos que pueden calmar a Katsuki. Es decir, los demás también pero, ellos lo hacen perfecto. Haciéndolo olvidar incluso el sentimiento que tenían hace unos minutos.
Sí, ese era él. Esos eran sus amigos.
Nunca iba a admitirlo, eso es un hecho.
— Kats, amor.– llamo el bicolor, rodeando la cintura de su novio–. Sabes que me gusta hacerlo. Acariciar y besar cada parte de tu cuerpo, apreciar la desnudez de tu alma y admirar cada parte de ti pero, hoy no quiero hacerlo. Solo quiero estar aquí.– beso su mejilla–. Así, junto a ti.
Se levantó, colocando sus manos a los costados de la cabeza de Katsuki. El rubio aún no cambiaba su expresión.
Shoto cerro los ojos, y bajo la cabeza soltando un suspiro. Soltó una pequeña risa. Había ocasiones en que de verdad quería solo estar a su lado, abrazándolo sin tener sexo de por medio. Sin embargo, no podía decirle "no" a ese gato amargoso.
Después de todo, también caía en la tentación.
— Está bien, solo una vez.– sin darle tiempo para reaccionar, le había bajado los pantalones.
— ¡Oye...!
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Corregiré errores al finalizar esto. No estoy segura de cuánto haré, pero estimo que serán más de 50 capítulos. Aclaro que las situaciones son durante días libres (la mayoría), de cualquier tipo, ya saben.
Si encuentran algo mal, me dicen, porfi 😞
Espero que les vaya a gustar, no prometo que sea bueno, pero intentaré sacarles más de una sonrisa. Eso o van a querer su vida de nuevo hace cinco minutos JAJAJS 🤗
