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Nota:
(Recomendable escuchar la melodía a la mitad del capítulos o después del ícono ❂)




— Por favor... Necesito ir, abuela, por favor...

— Claro, ven, bajemos...

El azabache toma la mano de la mayor para salir de su habitación y bajar junto a ella las escaleras, hasta llegar a la sala.

En ella habían muchas personas, al igual que él, vestidas de negro, muy serias, pero no más triste que él y su madre.

Cuando logró divisar aquella grande caja blanca con flores a su alrededor, pudo darse cuenta de que allí estaba su pequeña.

Se soltó un momento de la mano de su abuela para acercarse a mirarla por una última vez, pero no se dió cuenta que había una mujer llorando sin parar, de rodillas en el suelo a un lado de la caja.

Era su madre, quien al sentir a alguien acercarse, alzó por un momento la cabeza para mirar de quien se trataba, vió al azabache acercarse a la caja con lentitud y lágrimas en las mejillas.

Taehyung estaba por tocar la caja, cuando los gritos de su madre lo hicieron retroceder.

— ¡¡No te acerques!!... — Incluso le dió un empujón que casi lo hace caer —. ¡¡Ella está muerta!!, ¡está muerta por tu culpa!...

El azabache se asustó demasiado al verla muy enojada, con el cabello un poco despeinado y abundantes lágrimas en los ojos.

— ¡¡Lárgate!!, ¡vete de mi vista!, ¡no te le acerques más!... ¡¡Vete!!, ¡¡lárgate de aquí, ahora!!... — Ella arremetía en volver a empujar al azabache al mover sus manos frente a él de forma rápida, casi como si quisiera darle varias cachetadas.

El azabache, muy asustado, obedeció, salió corriendo de la sala, subiendo a las escaleras mientras era seguido por su abuela, quien siguió al pequeño azabache hasta su habitación, donde lo encontró de rodillas en el suelo con la cara en su cama, llorando nuevamente.

Taehyungie... — Ella se sentó en la cama, acariciando el cabello azabache.

Pero él seguía llorando, intentando callar sus lamentos para no poner más triste a su abuela.

Después de ese día, las cosas ya nunca volvieron a ser igual que antes.

Pero el azabache aún mantenía la esperanza de que todo volvería a ser como antes o mejor.







































































Horas más tarde, ese mismo día.

Jungkook estaba recostado en la cama al igual que Taehyung, quien lo abrazaba cómo un pequeño koala, con uno de sus brazos entre la cintura del pelinegro, mientras él acariciaba su cabello con lentitud.

Bored ~ KookTaeWhere stories live. Discover now