"Rompiendo las normas"

6."Una posible primer cita"

Mia Elizabeth.

Al día siguiente mi mañana transcurrió normal, hasta que me vi en el espejo y vi las grandes ojeras que tenia. No me pareció nada raro ya que la noche anterior me permití llorar, y no soy de esas personas que lloran por cualquier cosa, lo hago cuando alguien me lastima con algo que es importante para mi, y Russ… creí que me amaba.

Muchas veces cometemos el error de creer todo lo que nos dicen, pero al final lo que valen son las acciones y no las palabras. Porque terminan siendo eso, simples palabras y promesas que nunca serán cumplidas…

Cuando termino de maquillarme me levanto y me veo en el espejo, hoy me decidí por un conjunto de pantalones rotos color mostaza y una sudadera blanca, tenis del mismo color y algunos accesorios. Como el collar que me regalo mi madre que tiene forma de universo y unos pendientes dorados que me regalo mi padre cuando cumplí 16.

En el momento en que iba a abrir la puerta recuerdo lo que sucedió ayer entre Easton y yo. El fue muy amable al posponer una reunión muy importante solo para ir a traerme a la universidad, y por eso fui muy amable con el. El simple hecho de pensarlo hizo que mi mente creara conclusiones nada sanas para mi, así que decidí salir de una vez y dejar ir esos pensamientos.

Salgo de mi habitación y me dirijo hacia la cocina, cuando termino de cruzar la sala y entro en la cocina me topo con una superficie firme y suave. El aroma familiar hace que mis mejillas tomen color tomate, al levantar la mirada unos ojos azules me reciben con una sonrisa.

— Buenos días preciosa.

— Bu-buenos días

— Que te parece si vamos a desayunar? — me dice colocando sus manos en mis hombros

— A donde? —entrecierro los ojos— no estarás pensando en secuestrarme verdad?.

Easton ríe mientras pasa a mi lado y se dirige hacia la puerta de la entrada.

— Te aseguro que cuando piense hacerlo serás la primera que saberlo —me guiña un ojo— pero por ahora no, solo quiero llevarte a desayunar, hay algo malo con eso?

— No —sonrió— si tu invitas yo encantada.

Cuando se trata de comida no puedo negarme, pero eso no pienso decirle, pueda que después lo use en mi contra.

— Bueno entonces vamos —mueve la cabeza en dirección a la salida—
¿o prefieres que te cargue como ayer…

-— No, gracias —me apresuro a salir.

El resto del camino nos la pasamos en silencio, aproveche para ver mi alrededor, aun se ve un poco de nieve y es que ya estamos a finales de mayo.
Observo con mas atención, cada vez se ven menos casas, eso significa que nos estamos alejando.
Veo a familias paseando, en especial un padre que lleva de la mano a su hija, la niña se ve muy feliz —hago una mueca triste.

Mi padre y yo solíamos ser muy cercanos cuando mi madre aun seguía con vida, los dos trabajaban pero tenia tiempo para mi, jugábamos, reíamos, veíamos películas, conocíamos lugares nuevos, éramos felices..
Sin embargo eso cambio cuando tenia 6 años, mi padre empezó a trabajar mas con la excusa de que a mi no me faltara nada, y gracias a eso nunca tuve que pasar hambre.
Nunca me falto nada, o eso era lo que el creía. Me falto lo que una niña de 6 años anhela o necesita…

Atención.

Amor

Tiempo

Me toco vivir sola. Y talvez eso hizo que se me dificultara convivir con mis compañeros de clases. Pero logre pasar esa etapa y mejorar en todo, nunca me he considerado perfecta, pero he dado lo mejor de mi, sola.
Es por eso que no quiero que me afecte lo de Russ, nunca he necesitado de nadie y nunca lo hare.