Mes 2

1.2K 196 15
                                    

YoonGi miraba a su Omega, según las indicaciones de su madre Omega, debía tener paciencia, el cuerpo de su Omega pasaría por una serie de cambios emocionales, físicos, hormonales y psicológicos.

Se encontraba acariciando la espalda de JiMin, le había dado un recipiente para que no se moviera o tuviera algun accidente al correr hasta el baño.

- Dejalo salir, cielo...- susurraba sin detener las caricias en la espalda de su Omega.

- El bebé se ha levantado de mal humor...- murmura JiMin en medio de sollozos, se siente mal, el asco y las naúseas matutinas no le habían dado descanso desde hace una semana.

- Aquí estoy...- YoonGi trato que su aroma relajara a JiMin, quien al vaciar lo poco que había en su estomágo, se recargó en el cuerpo de YoonGi. La gestación en ese mes estaba siendo un poco dificil de manejar para el Omega, JiMin cargaba con hormonas que llamaban la atención cada que salía, lo ponían muy asustado y tenso, por consiguiente, su lobo siempre andaba en modo de ataque, lo que le hacía estar irritable. YoonGi no la pasaba muy bien tampoco, todo el malestar de JiMin, los lobos se lo comunicaban entre sí, eso no le dejaban concentarse en las reuniones.
Se desesperaba por ver a su Omega, trataba de controlarse pero a veces perdía el control.

- Me siento agotado, me da hambre y sueño... mi cuerpo no se siente mío...- JiMin se queja, YoonGi lo consuela y trata de ignorar su malestar propio.

- ¿Quieres que vayamos a la clínica?- ofrece y JiMin niega.- ¿Quieres una manta?- YoonGi hace suaves masajes en la cabeza de su pareja.

- Solo quedate aquí...- pide en un susurro. YoonGi asiente, cuando JiMin se queda dormido de nuevo, mira la hora, apenas son las seis de la mañana. Le deja una almohada para darle calor, mientras tomaba el recipiente y lo limpiaba en el cuarto de baño, volvía a dejarlo junto a la cama, y se remoja la cara para despertar. Va a la cocina y llama a su madre.

- Mamá... perdón la hora, JiMin no la esta pasando bien, ¿algo que pueda comer sin vomitar?- YoonGi dice preocupado- Los vómitos no lo dejan descansar, no sé que hacer... he visto muchos blogs de Omegas gestantes para saber que hacer, pero me preocupa que se sienta mal...- su madre trata de calmarlo, y comienza a darle indicaciones- Si tengo eso, espero que pueda comerlo...

YoonGi le hace pollo con pocos condimentos, pica un poco de kiwi y el jugo de manzana que JiMin comúnmente consume. Tuesta unas rebanadas de pan integral y coloca todo en una bandeja junto con su propio desayuno.

Ve a su Omega dormido, se sienta a su lado y sonríe al ver como cubre su vientre con la almohada que tiene su aroma, ambos lobitos amaban la mezcla de sus aromas, JiMin tenía un aroma dulce y relajante, él tenía un aroma mas silvestre y mentolado.

JiMin hace pequeños gestos y trata de despertarse.

- Yoonie...- llama y se voltea. YoonGi le mira con una sonrisa.

- ¿Cómo te sientes?- le pregunta y le ayuda a acomodarse.

- Mejor... con hambre...- JiMin dice risueño. Un bostezo se escapa y YoonGi ríe.

- Espero que mi Omega y cachorro acepten la comida que he hecho...- JiMin se siente conmovido y asiente. YoonGi le coloca la bandeja, desplegando el soporte y que JiMin no corra el riesgo de quemarse con algo.

El desayuno es normal y contra todo pronóstico, JiMin no se siente asqueado de la comida, su cuerpo lo recibe muy bien y su lobo está tranquilo.

- Tengo que trabajar, pero SeokJin me dijo que pasará a verte antes de su turno...- le menciona YoonGi, JiMin lo mira con atención.- Pero, si sientes algun malestar, llamame para que pueda ayudarte, Mark dijo que ante cualquier duda vendría hasta aquí, cielo...

JiMin asiente, comen entre comentarios de lo que JiMin hará, ya que su Omega llevaría su trabajo ha distancia los próximos meses, YoonGi había gruñido exigiendo la consideración a su Omega en estado. Además de que la madre de su Omega también fue de ayuda para lograr que a JiMin le dejaran trabajar desde casa, porque se sentía amenazado, YoonGi nunca desconfió de su esposo pero con el embarazo sus hormonas se habían disparado con su aroma, a veces era muy intenso y otras veces apenas podía percibirlo, era un riesgo que JiMin se expusiera de esa manera, habló con él acerca de las opciones y JiMin preguntó si había forma de hacer trabajo en casa, prefería eso a tener que salir y ser atacado por algun adolescente que no contralara su lado lobuno.

- JiMinie...- llama a su pareja luego de darse un baño.- Te amo, cielo...- besa sus labios delicadamente- Los veo más tarde, voy a reducir mi turno para estar contigo y nuestro bebé...

Sí... JiMin tenía un buen Alfa a su lado...

Sí los Alfas se embarazaran...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora