En Manada // NCT

Hot dogs nocturnos

Jisung le tenía un poco de envidia a Yangyang.

Es decir, al igual que él, el taiwanés era el maknae en su camada, con la diferencia de que era el único cachorro que sus hyungs tenían. Por lo tanto, Yangyang era dueño de recibir la mayor parte de la atención y los mimos de los omegas, así como también era el consentido de todos sus alfas.

Y es que Jisung comparaba el trato que recibía el cachorro mayor con el propio, y veía una clara diferencia.
Mientras que Yangyang podía pasar el día de regazo en regazo, él debía compartir el tiempo y la atención de su omega con otros tres cachorros, un estúpido alfa y dos omegas más.

Puesto que Jeno se comporta como un niño más, y el único ápice de dominio y protección se lo lleva Jaemin, suelen sentir la ausencia de un verdadero alfa como lo serían Kun y Winwin. Y luego están Shotaro y Renjun, que lo único omega que tenían era el aroma, pues ninguno de los dos era dócil y cariñoso como Hendery, y mucho menos sensual y atractivo como Ten.

Haechan lo era todo para ellos, el pobre omega debía cubrir todos los puestos faltantes dentro de su gran camada, el rol de alfa protector, el de líder exigente, hyung sabio, maquina de abrazos, y no es que Donghyuck no fuera suficiente para Jisung, lo era, siempre lo seria, pero el maknae no quería tener que compartirlo constantemente con sus compañeros.

Y fue viendo a Yangynag sobre las piernas de Kun en medio de un descanso cuando Jisung se dio cuenta de que el quería ser egoísta y tener ese tipo de atenciones.

Y es que la ultima vez que el estuvo sobre las piernas de un alfa fue con Jeno, ¡y solo fue porque no había mas asientos disponibles!, en ningún momento el tonto alfa lo habia acariciado como Kun lo hacia con Yangyang en ese precioso momento.

—Jisung, ¿está todo bien?

El maknae saltó sobre su lugar al sentir la mano de Lucas sobre su cabello. No lo habia oído llegar por estar demasiado sumido en sus pensamientos.

—Oh, hyung. Si, todo esta bien, solo estoy algo cansado.— sonrió al mayor quien continuaba haciéndole mimos en el cabello.

—Asegúrate de descansar correctamente, cachorro. No queremos que te enfermes.

Jisung se sonrojó un poco y agachó la mirada con algo de pena, susurrando apenas una respuesta para el alfa mayor que poco después lo dejó para ir a juguetear con el resto.

Park suspiró con cansancio para finalmente levantarse del nada cómodo suelo y continuar con el baile de turno. No estaba para nada de buen humor, y aquello se reflejaba claramente en sus movimientos a la hora de bailar, se habia confundido múltiples veces en una coreografía estúpidamente simple.

—Jisung, ¿¡Qué se supone que estas haciendo?! ¿podrías hacernos el favor de concentrarte?- se quejó Chenle la séptima vez que tuvieron que parar la canción porque el maknae cometía fallos tontos y tropiezos descuidados.

—Déjalo, Chenle. Todos estamos cansados, es mejor terminar por hoy, ya mañana podremos seguir.— Kun defendió al menor haciendo que Chenle refunfuñe por un rato. Jisung solo lo ignoró y comenzó a recoger sus cosas para irse a casa.

Una vez salió de la sala de ensayos caminó unos pocos pasos antes de sentir una mano en su muñeca. Se giró buscando soltarse del agarre contrario hasta que vio que aquella mano pertenecía a Yangyang, entonces, se quedó quieto mirándolo con el ceño fruncido.

—Hey ¿todo bien?— Jisung solo asintió, ¿Cuántas veces le preguntarían eso en el día? —Ignora a Chenle, lo estás haciendo bien, él solo está molesto por el cansancio.

—Lo sé, lo conozco, no te preocupes— quizás su voz había salió más seca de lo esperado, pero tampoco le importaba.

Yangyang desvió la mirada avergonzado y mordisqueó un poco su labio, pero aún así no soltó su agarre.