LITTLE BRENDA.

CAPITULO 4

B R E N D A.

HAN PASADO UNOS DIAS DESDE QUE VIVO con los Lombardi, me encanta estar con ellos me siento segura y protegida como con mamá.

Les contaré un poco de mi historia, a los 6 años mi madre murió, desde ahí fui una niña muy madura nunca jugaba con muñecas o lo que un niño de esa edad hace normalmente, tenía mi vida muy ocupada, pero se preguntaran.

¿Como una niña de 6 años puede estar ocupada?

Mi padre se volvió muy rebelde conmigo tanto así que me pegaba y me maltrato mentalmente, los días eran un infierno para mí, mi padre siempre me echaba la culpa de todo.

El trabajaba por lo que tenía que quedarme en casa sola por lo que no comía en todo el día (ni que el también me hiciera comida), comía lo que sobraba en la nevera o lo que había.

Con ello agarre una infección en mi estómago, así que tenía que comer cosas más líquidas que no sean tan gruesas (puedo comer dulces en vez en cuando).

Mi padre se aburrió de mi así que me llevo al orfanato.

-"¿a dónde vamos padre?"- pregunté

-"a dónde perteneces".-

Me dejó allí, con una maleta a mi lado con todas mis cosas no se en que momento el lo había a reglado, pero el tema es que estaba en un orfanato sin conocer a nadie ni saber que hacer.

Entonces conocí a la ama elizabeth que me ayudó en todo, me trató como era debido y ahora estoy en una hermosa casa llena de comida y ropa para mi solita.

- hola princesa.- dijo Manuel al verme en el sillón, tenía un pañal puesto desde que paso lo del accidente los uso (son muy cómodos para mí)

- hola..- dije con suavidad no sabía que decir después de ello.

-¿Necesitas un cambio?- me sonroje, nunca me habían cambiado el pañal, solo lo uso al dormir y luego me lo quitaba yo misma, pero ahora lo tenía puesto.

Estaba toda llena de orine y se me había olvidado quitarmelo.

- y-yo pu-edo sola.- respondí con nervios, que estubiera al frente de un espejo vería lo roja que estoy.

- princesa no quiero que se te irrite y no puedas ponerte lo bien, yo te lo cambio, no haré nada malo.- dijo con tranquilidad para que me sintiera segura.

Asentí con mi cabeza y el me tomó de la mano para ir a cambiarme.

Me sentó en la cama y me quito el pantalón de pijama.

-¿Que quieres comer hoy princesa? ¿Espagueti? ¿Arroz? ¿Pollo?- dijo con una sonrisa.

- y-yo quiero espagueti por favor.-

- entonces eso obtendrá la princesa de la casa, esperemos a que llegue Dani comerás la comida con frutas ¿te parece bien?-

-¡Sii!-

-listo.- no me di cuenta cuando ya había terminado de poner mi pañal no sentí nada.- vamos abajo a esperar la comida.- me bajo de la cama y fuimos a la cocina.

Al llegar a la mencionada Daniel estaba entrando por la puerta principal, había salido al mercado a comprar cosas que faltaban para la casa.

- llegué.- dijo al verme en silla, a un lado había una silla de comer de bebé.

Todavía tengo curiosidad si van a tener otro hijo aparte de mi.

-hola dani.- dije con una sonrisa y el me beso el cachete.