Los Cuatro Reinos - Magie & Love #3 (Secuela)

Capítulo 62

"El fin de los Finch"

Narra Katrien

Horas después..

La parte superior de mi cuerpo se encuentra recostada encima del pecho de Balderick quien juega con mi cabello ahora desarreglado. Lo observo con atención aun sin dejar de pensar en lo que pasó, claro que se notó la inexperiencia de parte de los dos, sin embargo, el que aprendiéramos juntos lo hizo más especial.

- Te amo – digo de la nada haciéndolo sonreír

- Yo también te amo – dice con cariño

Me acerco a sus labios para besarlo con ternura a lo cual el corresponde acariciándome con delicadeza.

- ¡Ya venimos!...- el grito de Asteria nos asusta haciendo que me cubra al instante con las sábanas - ¡Ay perdón nos vamos! – grita cerrando la puerta

A penas me da tiempo de analizar lo sucedido, volteo a ver a Balderick quien está en la misma que yo y en cuanto nos miramos, ambos nos reímos de la situación que por vergonzosa que sea, también fue graciosa, ya me imagino el rostro de las mujeres de mi familia.

En cuanto las risas paran se levanta, me da un corto beso antes vestirse, al estar listo abre la puerta de la habitación donde logro ver a las mujeres de la familia quienes lo ven atento.

- Me retiro...con permiso – dice mi esposo comenzando a caminar

Mientras se aleja las mujeres lo siguen con la mirada hasta que de seguro desaparece de su vista y luego su vista cae en mi provocando que me sonroje tratando de cubrirme con mis brazos.

- Cuando dije descansar, no me refería a eso – habla mamá entrando a la habitación

- Cada quien descansa a su modo, déjalos – dice mi tía Vanya entrando con las cosas para maquillarme y peinarme

- ¿Todas nos vieron? – pregunto

- Abrí la puerta de golpe e intentábamos entrar juntas, así que sí...– comenta Asteria cerrando la puerta y señala el picaporte – Esta cosa si le mueves esto...- una llave – Evitas que las personas te vean con tu esposo en intimidad – alega

Me río y asiento comprendiendo. La mujeres me hacen levantarme y tomar otro baño, en cuanto estoy lista comienzan a prepararme. No tardan mucho en dejarme lista. A diferencia de la mañana, mi maquillaje es un poco más intenso y mis labios son completamente rojos, mi cabello está en una pequeña media cola dejando espacio para la corona y el resto suelto.

Toman mi vestido para ayudarme a vestir y como dije, este vestido es más extravagante que el primero. Es con corte en V, con mangas caídas que parecen pétalos de rosas entrelazados entre sí al igual que toda la parte del corsé, luego la falda es liza y amplia con los mismos detalles de pétalos en la orilla.

Me coloco las joyas de oro que me regalaron mis padres que tiene piedras y detalles que combinan con el vestido y mi futura corona. Dirijo mi mirada a la esquina del espejo viendo a la serpiente negra aparecer, extiendo mi mano dejándola subir y se termina escondiendo en mi pelo.

Sigo arreglándome y termino suspirando un poco más tranquila que en la mañana, sonrío levemente al recordar a mi esposo.

- Ya lo vas a ver tranquila, no te me alborotes – me molesta Asteria notando mi rostro

Tocan la puerta y ella camina para abrirla mientras me mira con una sonrisa divertida.

- Ya te quiero ver cuando te cases – respondo mientras abre

- A diferencia de ti, si pondré doble llave a la puerta para que nadie me encuentre con mi esposo en intimidad – responde

- Me parece buena idea – habla mi hermano