Niño interior.

35 9 2
                                    

Sé que hay un niño en ti, un niño que sufrió demasiado por situaciones injustas de la vida, un niño que no merecía ni tan solo un poco del daño que le hicieron. Un niño que debía ser feliz, y que en muchas ocasiones no lo fue.

Es tan difícil imaginarme a ese niño llorar, y se me hace injusto que ese niño siga herido, ahí, viviendo dentro de ti. Porque puedo ver tus grietas, puedo ver ese dolor en tus ojos cuando mencionan a esa persona y sé cuanto te afecta, aunque tú creas que no, lo perfectamente.

Quiero sanar a ese niño, quiero abrazarlo y decirle que todo está bien, que es una persona genuinamente maravillosa, que va a ser feliz aunque crea que no. Quiero que se sienta apoyado, que reconozca el amor verdadero de una persona.

Quiero hacerlo sentir seguro, curar con pasión todas esas heridas que hay del pasado, borrar las inseguridades con una borra y escribir cumplidos que las suplanten.

Quiero hablarle, decirle que hay alguien que verdaderamente lo ama con el corazón, y que si en algún momento le hace daño no es por decisión propia, que me perdone de antemano si eso llegase a suceder. Deseo que él se exprese conmigo, sin filtros, sin miedo a ser juzgado, yo felizmente lo voy a escuchar poniendo toda la atención para que sienta que realmente me importa.

Anhelo poder decirle que si en algún momento llegase a sobre pensar algo que me lo diga sin miedo, me encargaría de explicarle por muchas horas el porqué no debería sentirse así, y le contaría entre risas las razones por las cuales sigo junto a él, amando cada faceta que conozco diariamente. La buena, la no tan buena, la mala, la pésima.

Estaría feliz si pudiera quitarle todo el dolor a ese niño y quedármelo yo, porque no lo merecía, ese niño no lo merecía.

Y aunque ese niño esté escondido, siempre será bienvenido en mí, siempre estaré feliz de amarlo, de escucharlo, de sanarlo, de hacerlo sentir bien.

Esta no es una carta solo para ti, también es para ese niño que está ahí, escondido en lo más profundo de tu ser, ese niño herido que merece ser curado con amor y olvidar todo aquello que pasó, que ese niño sepa que hay alguien que lo ama, a él, y a su versión grande también.

SALMAWhere stories live. Discover now