XI. King of nothing.

277 44 2
                                    

PASAMOS DOS DIAS VIAJANDO EN EL TREN AMTRAK, A TRAVÉS DE RÍOS, COLINAS Y MARES DE TRIGO ÁMBAR.

-No te preocupes - Dijo Annabeth, mientras todos mirábamos una foto de Percy -. Los policías son mortales, no podrán encontrarnos - Aún así, no sonaba convencida.

-Estoy seguro que no funciona así - Grover se metió a la conversación y al recibir una mala mirada mía, se retracto -. Aunque estoy seguro que sí, ya sabes, mortales.

-Saliste bien en la foto -. Le sonreí a Percy, intentando cambiar de tema.

Pasamos el resto del día paseando por el tren o mirando por las ventanillas junto a Percy, describiendo dibujos en las nubes.

El dinero de la recompensa por devolver a Gladis nos había servido para comprar billetes hasta Denver. No nos alcanzaba para literas, así que dormitábamos en nuestros asientos.

Grover se revolvió en su propio asiento y provocando que su falso pie cayera al suelo, es específicamente golpeando un pie real y el de Annabeth. Por lo que entre los tres intentamos ponérselo de nuevo antes de que los otros pasajeros se dieran cuenta.

-Bien - Annabeth sonrió al terminar de ponerle el pie a Grover.

-¿Quién quería tu ayuda, Percy? - Pregunté curiosa, no podría aguantar la curiosidad más tiempo.

-¿Qué? - Percy me miró confundido y yo solo sonreí.

-Hace un momento, cuando estabas durmiendo...

-Murmurabas «No voy a ayudarte» - Interrumpió Annabeth y miro al chico -. Eres muy molesto cuando duermes.

-Volviendo al tema - La ignore completamente -. ¿Con quién soñabas?

Percy nos confesó que había estado soñando con una voz "maligna" del foso.

-No parece que se trate de Hades - Dijo Annabeth -. Siempre aparece encima de un trono negro, y nunca ríe.

-Pero si lo que quería es que lo ayudaras a salir del Inframundo, si lo que busca es desatar una guerra contra los Olímpicos, ¿por qué te pide que le lleves el rayo maestro si ya lo tiene? -. Hablé confusa, no entendía muy bien lo que pasaba y sentía que era algo mucho peor.

-Percy, no puedes hacer un trato con Hades. Ya lo sabes, ¿verdad? Es mentiroso, no tiene corazón y sí mucha avaricia. No me importa que sea benévolas no se mostraran tan agresivas esta vez... - Hablo Annabeth.

-¿Está vez? ¿Quieres decir que ya te habías encontrado con ellas antes? - Me saque el collar y le mostré una de las pelotitas de este, llevaba pintada la imagen de un pino.

-Digamos que no tenemos ningún aprecio por el Señor de los Muertos. No puede tentarte para hacer un trato a cambio de tu madre -. Hablo la otra rubia, ambas sabíamos que a mi siempre me había costado hablar más de Thalía.

-¿Qué harían si fuera tu madre o su padre? - Nos pregunto el pelinegro.

-Eso es bastante fácil, Percy -. Conteste con un nudo en la garganta -. La dejaría pudrirse ahí.

-¿A qué viene eso? - Me habló, mirándome con un deje de confusión.

-Mi madre me odia -. Le dije y corrí mi mirada, sintiendo una mano en mi hombro -. Ella me odia desde que nací y no porque haya aparecido así de la nada, sino por el parecido con Apolo.

LOVER - PERCY JACKSON Where stories live. Discover now