LOVER - PERCY JACKSON

XIV. Romantic walk ends in horror.

EL SOL SE HUNDÍA TRAS LAS MONTAÑAS CUANDO ENCONTRAMOS EL PARQUE ACUÁTICO. PARECÍA QUE ORIGINALMENTE SE LLAMABA "WATERLAND", PERO ALGUNAS LETRAS HABÍAN DESAPARECIDO, ASÍ QUE SE LEÍA: "WAT R A D".

La puerta principal estaba cerrada con candado y protegida con alambre de espino. Dentro, enormes y secos toboganes, tubos y tuberías se enroscaban por todas partes, en dirección a las piscinas vacías. Entradas viejas y anuncios revoloteaban por el asfalto. Al anochecer, aquel lugar tenía aspecto triste y daba escalofríos. Muy oscuro para mi gusto.

-Si Ares trae aquí a su novia para una cita -Dijo Percy mirando el alambre de espino -, no quiero imaginarme que aspecto tendrá.

-Percy -Intervino Annabeth -, tienes que ser más respetuoso.

-¿Por qué? Creí que odiaban a Ares.

-Puedo odiar a Ares, pero su novia es verdaderamente hermosa -Dije sin dudar.

-Ademas, sigue siendo un dios. Y su novia es muy temperamental.

-No deberías insultar su aspecto -Añadió Grover.

-¿Quién es? ¿Equidna? -Intentó bromear y todos los miramos mal.

-Afrodita, Percy. Es Afrodita la novia -Rode mis ojos -. La diosa del amor y la belleza.

-Pensaba que estaba casada con alguien -Dijo y volví a rodar mis ojos -. ¿Con Hefestos?

-¿Y qué si fuera así? -Pregunté y luego lo mire directo a los ojos -. De todas formas, ese casamiento no se dió por amor de ambas partes. Afrodita fue obligada a casarse y dejar a su verdadero amor; Ares.

-Bueno... -Percy se rasco la cabeza -. ¿Y cómo entramos?

-Maya -Al instante surgieron las alas de las zapatillas de Luke.

Voló por encima de la valla, dió un involuntario salto mortal y aterrizó en una plata forma al otro lado. Se sacudió el pantalón.

-Vamos, chicos.

-Mucho trabajo, ¿no creen? -Murmuré a la vez que era obligada por la rubia a comenzar a trepar el alambre de espino.

Las sombras parecieron alargarse mientras recorríamos el parque, examinando las atracciones. Intente caminar lo más cercano a los chicos, odiaba la oscuridad.

Ningún monstruo atacó y no oímos el menor ruido. Encontramos una tienda llena de souvenirs que había quedado abierta. Aún había mercancía en las estanterías: bolas de nieve artificial, lápices, postales e hileras de ropa.

-Ropa -Dijo rápidamente Annabeth -. Ropa limpia.

-Sí -Dijo Percy -. Pero no pueden ir y...

-¿Ah, no?

-Yo no veo a nadie aquí que nos lo impida -Dije a la vez que con Annabeth agarrábamos la ropa que podíamos para irnos a cambiar. En el camino me guarde dos lapiceras y un par de postales.

-Mira -Con una sonrisa le mostré mi nueva colección favorita de prenda, unos shorts amarillos -. Me encantan. Son mi estilo definitivamente.