Nayeon es brillante, hermosa, popular, amable, admirada y temida por todos.
Bueno, a nivel académico no podemos decir mucho, maquillándose en clases, charlando con sus amigas y escribiendo por el celular. Nunca tuvo problemas a pesar de ello, pues c...
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Tonta, tonta, tonta, tonta, ¡Tonta, tonta, tonta!
¡¿Cómo voy a decirle "te amo" así?! ¡Ni siquiera me respondió!
¿Que si me dolió que no respondiera? ¡Pues sí, mucho! ¡Seguro la incomodé! ¡No se movió ni un centímetro!
Soy una idiota.
Me siento como una niña pequeña aferrada a ella, soy incapaz de soltarla o de despegarme de su pecho. Me gusta la forma en la que su calor corporal me envuelve y adoro el olor que hay en su cuello.
Consigo entre impresionante y gracioso estar despierta antes que ella, se ve relajada y su respiración sigue tranquila. Solo uno de sus brazos sostiene mi cintura a penas mientras mi cabeza descansa en el otro. No sé en qué momento terminamos abrazadas una frente a la otra, solo sé que nos dormimos entre besos y no podía sentirme más feliz y tranquila que ahora.
Cada ciertos minutos, a mi mente viene el pensamiento de haberle dicho "te amo" anoche. ¿Debería asumirlo como una broma?
Desde el primer momento sé que Jeongyeon no debería sentir sentimientos tan fuertes hacia mi como yo hacia ella. Hace a penas un par de semanas que nos declaramos y ella misma dijo que le empecé a gustar en año nuevo, ¡Fue hace poco más de un mes! Es relativamente poco. Sumándose el hecho de que nuestra amistad tampoco es la más larga.
Me siento estúpida de haber dejado eso salir. Solo espero que Jeongyeon no se lo tome muy en serio.
Cierro los ojos y disfruto su presencia y calor, dormí tan bien que no tengo sueño ni estoy cansada, pero toda su presencia me relaja. Debo admitir que he dejado más besos en su cuello de los cuales admitiría la culpa.
Finalmente Jeongyeon se remueve un poco y suelta un pequeño gruñido, sus brazos me estrechan y ella se acurruca en mi sin abrir ni un poco sus ojos. Mi corazón casi se sale de mi pecho y mis mejillas arden, ¿Es así de bonita al despertar siempre?
Ella se estira una última vez antes de separarse un poco de mi y abrir los ojos.
Mientras mis mejillas arden mientras la veo, ella me da una sonrisa de labios juntos, tiene un temblante tierno y a la vez atractivo que me tiene los sentimientos a flor de piel.
—Buenos días, Nayeon... —su voz se oye ronca y arrastra las palabras de un modo que me resulta increíblemente atractivo.
La voz de recién levantada debería ser eterna.
—Bu-... —aclaro mi garganta de inmediato al sentir como mi voz se va de forma vergonzosa—, Buenos días...
Ella sonríe, pero ahora de una extraña manera burlona que me hace sentirme avergonzada de mi tartamudeo.
