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La boda ya no era de un hermoso color blanco, todo había pasado aún color rojo, un rojo que se había extendido gracias al tercer hijo varón de Vinsmoke Jugde.
Hijo que ahora tenía las manos manchadas y la mirada perdida en los cadáveres de sus invitados y deteniéndo los golpes de uno de sus compañeros.
Tampoco es como si Sanji estuviera cuerdo para darse cuenta que golpeaba a Luffy y lograba sacarle sangre en lo que mandaba muy lejos a Law y Ace.
Sabo están más que agotado y Big Mom lo suficientemente aturdida para darse cuenta de lo que estaba pasando. Era un gran caos.
──Y pensar que una vez seguí tus órdenes, capital── la voz ya no es suave y no tiene una pizca de burla.
Luffy se siente tan miserable que no se defiende y no tiene palabras para reprochar lo que dice Sanji. Esta tan cansado al igual que todos.
Sin embargo tres espadas resaltan en todo el caos, Luffy es quitado del campo de batalla y eso alegra al Vinsmoke que hace arder sus piernas de un celeste.
──Ja, al fin decides pelear espadachín de mierda── su tono es tan altanero que Zoro no puede reconocer a Sanji ──O solo vas a ser un estorbo más.
El primer movimiento de Sanji comienza y Zoro logra evitarlo con una de sus katanas, no tiene intención de lastimar al omega rubio, recuerda que es su destinado.
Pero también recuerda que no es su destinado, no es el cocinero de cuarto que logra sacarlo de sus casillas. No es el Sanji que ama Luffy.
Y eso molesta a Zoro, porque hasta el final aún sigue negando sus sentimientos por Sanji y es una gran contradictoria.
Quiere traer de nuevo al rubio pero también quiere dejarlo así como está, quiere que se pierda en la oscuridad que no debió salir.
──¡Maldito bastardo deja de jugar!── y al parecer al nuevo Sanji no le gusta que sea tratado como un juguete.
Eso llama bastante la atención a Zoro, si el Sanji que el conocía hubiera sido como este Sanji desquiciado y sin sentido de sentimientos quizás lo hubiera aceptado desde el principio.
──Eso hago── las espadas son sacadas de su funda y en ellas se puede ver el reflejo de Zoro y Sanji ──No me culpes por lo que pase después cocinero.
Sanji sonríe con crueldad y vota su cabello hacia atrás y limpia las gotas de sangre que manchan sus mejillas.
──Si en todo este tiempo no me importó que te hace pensar que ahora me va a importar── y como si Zoro hubiera viajado al pasado puede ver una navaja en la mano de Sanji y una pose tan familiar ──Sere feliz una vez que mire al conejo morir.
Zoro ahora quien ríe y bajo las katanas, sintiendo un inmenso dolor en el pecho aún así se recupera y vuelve a volver a su objetivo inicial.
──Digno hijo de Mihawk── es lo que dice y va donde Sanji, quien se aturde y trata de recuperar la compostura pero no logra y es herido en el muslo ──Quizas no.
