Apuestas y capitanes del barco

2.2K 116 27
                                    

El miércoles pasó rápido, estuvieron casi todo el día ensayando y en clases, tuvieron su primera clase con Vicky, la cual les dijo que no tendrían mucha coreografía en esa canción pero que debían mostrar soltura.

Para cuando se dieron cuenta, estaban en la cena, divididos en dos mesas, pues todos no entraban en una. Elizabeth se sentó en la mesa de Omar, Lucas, Naiara, Paul, Cris, Alex  y Ruslana, pues Ruslana y Naiara era con las que más confianza tenía, y además, Lucas y Alex también le caían muy bien. Con los demás no había hablado casi, pero tenía claro que se llevaría genial con ellos.

La otra mesa era ruidosa, esta no tanto. 

En la otra mesa estaba Chiara, en esta no.

Elizabeth sacudió suavemente su cabeza al pensar aquello. ¿Por qué le importaba tanto donde estuviera Chiara? Juanjo tampoco estaba en esa mesa, ni Álvaro, ni Violeta... ¿por qué solo había pensado en Chiara?

Levantó su rostro del plató y lo dirigió hacia la otra mesa, más específicamente a donde estaba Chiara, descubriendo que esta ya la miraba de antes. 

Fue entonces cuando descubrieron que todo este tiempo, el juego de miradas había sido cosa de dos, no cosa de solo una. 

Elizabeth fue la primera en apartar la mirada, algo avergonzada, y se dedicó a comer de su plato, mientras que Chiara no pudo evitar reír de manera suave al ver la cara de Elizabeth cuando conectaron miradas. 

Al final, ese juego iba a ser más interesante de lo que esperaba. 

...

— Para no verte más. —  Cantó Elizabeth en un box. Estaba después de la cena ensayando, pues había una parte de la canción que no le salía del todo y quería perfeccionarla. Ella cantaba mientras tocaba los acordes de la canción, los cuales se había aprendido aquel día.—  Para no verte más.

Y ahí fue cuando su voz decidió abandonar, de nuevo, en el mismo sitio. Tenía un agudo en esa frase, y no sabía por qué, no le salía, siempre que intentaba llegar, su voz se cortaba o se iba hacia otra nota.

— Joder.— Murmuró golpeando al piano, pero al momento se arrepintió.—  Perdón. — Susurró acariciando las teclas del teclado.— Tú no tienes la culpa de que mi voz esté para la mierda hoy.

— ¿Hablas sola? —  Elizabeth se asustó al escuchar una voz en la puerta del box, ¿cómo podía ser que Chiara siempre estuviese en la puerta donde ella ensayaba y nunca se diera cuenta de que estaba ahí? 

— No, eh... — La rubia miró a su alrededor y alzó ambos hombros, ¿quedaba más raro decir que hablaba sola o que le estaba pidiendo perdón al piano?— Solo estaba... ensayando. 

— ¿Te importa si me quedo aquí? — Preguntó la pelinegra aún parada en la puerta del box, con las gafas, como siempre, caídas por el puente de su nariz.— Me gustaría componer un poco antes de ir con los demás, y en los otros boxes hay mucha gente and it's too noisy.

— Si, claro, puedes quedarte, no me molesta.— Le respondió Elizabeth con una pequeña sonrisa, viendo como Chiara sonreía del mismo modo. 

La pelinegra se sentó en una silla y se apoyó en el piano, con su libreta allí y un lápiz en su mano, pensando en cosas que escribir. Elizabeth la miraba con algo de curiosidad, siempre le había llamado mucho la atención la gente que sabía componer, pues ella nunca había sabido rimar ni la palabra "saltar", por ejemplo.

Tras unos segundos mirando a Chiara mientras esta escribía, decidió que tenía que seguir ensayando, pues aún no llegaba a aquella nota y no quería hacer mal el pase de micros que tenían al día siguiente. Lo intentó una, dos, tres veces, pero entre la vergüenza de que Chiara la viese fallando de ese modo y que seguía sin llegar, se estaba frustrando demasiado.

El juego de quererte en secreto [Chiara OT 2023]Where stories live. Discover now