❝Valquiria❞ |𝙉𝙄𝙆𝙊𝙇𝘼 𝙏𝙀𝙎𝙇𝘼| [ʳᵉᶜᵒʳᵈ ᵒᶠ ʳᵃᵍⁿᵃʳᵒᵏ] ✔︎

1.

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⋆ | CAPÍTULO UNO. | ⋆

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Suspiro aburrida, recargándose perezosamente en el colchón a sus espaldas. Miro a su alrededor, observando con sumo detalle el lugar, su habitación nunca le había parecido tan aburrida como ahora.

—Debí haber ido con ellas, hubiera sido más entretenida que estar aquí encerrada. —Murmuro mirando al techo, aburrida.

Se levantó del suelo y salió de su habitación, con la esperanza de alcanzar a Brunhilde. Cuando estuvo frente a la puerta de ella tocó con desespero esperando que estuviera, pero nadie respondió. Hizo una mueca y abrió la puerta encontrando una oscura habitación vacía, con unos cuantos papeles regados en el escritorio cercano a la cama, una pantalla flotando con luz azulada en medio del escritorio mostró imágenes de humanos reconocidos en la historia.

La curiosidad mato al gato, y ella cayó en la trampa. Miro por los pasillos esperando que Brunhilde no llegará, asegurándose de que nadie estaba cerca entro a la habitación acercándose al escritorio miro los documentos. Hablaban sobre el Ragnarok, lo había escuchado algunas veces, era lo que Brunhilde estaba planeando para salvar a la humanidad.

Su mirada verde se oscureció al leer uno de los documentos, dejando caer las hojas. Su mente proceso la parte secreta del plan... El Ragnarok no era para salvar a la humanidad, Brunhilde solamente quería salvar a su novio Sigurd.

Revisó la pantalla de que mostraba las imágenes de los posibles candidatos para participar en el Ragnarok, humanos que habían sobresalido, por ser más fuertes o incluso inteligentes. También se encontraban los datos de cada una de las trece valquirias, y sus compatibilidades con algunos de los humanos en la lista de candidatos.

Entro a su perfil, encontrándose con algunos nombres de hombres famosos en la historia humana, tales como: Michael Nostradamus, Nikola Tesla, Julio César, Gengis Kan, Adolf Hitler, George Washington, Isaac Newton, William Shakespeare... La lista parecía eterna, pestañeo un par de veces procesando sus compatibilidades con los humanos. ¿Si quiera era posible establecer una relación Humano/Valquiria? Si fuera así, ¿Cómo?
Confundida miro nuevamente los nombres y porcentajes, resaltando ante sus ojos un nombre en particular. Nikola Tesla, mantuvo su respiración mientras miraba con asombro el perfil del científico e inventor.

—Nikola Tesla... —Susurro para sí misma mirando la imagen con determinada atención. Parecía encontrarse hipnotizada.

Se alteró al escuchar los pasos acercarse por el pasillo, el tacón de las botas de Brunhilde hacía eco junto a su voz. Hablando con seriedad sobre el Ragnarok y como habían convencido a los dioses de llevarlo a cabo. El cuerpo de la joven pelirroja tembló a la simple idea de una muerte contra los dioses, ¿La humanidad tendría oportunidad de ganar?
Acomodo todo nuevamente en su lugar, dejando todo como recordaba haberlo encontrado. Busco una forma de esconderse, observando la ventana entre abierta que daba hacia el jardín del Valhalla. Dudo, pero al escuchar los pasos detenerse supo que estaban por entrar. No tuvo más remedio que salir por la ventana, cayendo de rodillas en el césped se lastimó, aguanto el dolor mientras sigilosamente regresaba a su habitación. Aquello había sido mejor que soportar los regaños de su hermana mayor e incluso esa gélida mirada que la primera valquiria poseía.

Tembló con ese solo pensamiento, suspiro recargando su espalda en la puerta de su habitación, encerrada nuevamente como si nada de lo que había hecho, hubiera pasado. Se sintió rara. ¿Alguna de sus hermanas sabía sobre esto?
Era posible que no, mordiendo levemente su labio inferior. Pensó en la posibilidad que tenía de decirles a las demás, pero eso no estaría bien. Después de todo, el Ragnarok también podía salvar a la humanidad. Claro, si los humanos lograban ganar contra los dioses.

—Völundr... ¿Qué se supone que es eso? —Se preguntó a si misma mirando al techo cuando a su mente regreso la reciente información que había captado de los papeles.

La quinta valquiria mordió sus uñas caminando de un lado al otro en su habitación, su rodilla lastimada sangraba, chuequeando ante el dolor punzante continúo yendo de un lado al otro, pensando, como si fuese ella la estratega de la batalla. La puerta de su habitación fue tocada, llamando su atención, ocultó rápidamente la herida de su rodilla con la falda de su vestido negro, tratando de caminar con normalidad se acercó hasta la puerta y la abrió pasando su mano por el sensor. Observo a su hermana menor, Göll se encontraba sonriéndole levemente.

—Hermana Dahlia. La hermana Brunhilde nos está reuniendo a todas las hermanas para hablar con nosotros, con respecto al Ragnarok. —Informó la pequeña de las valquirias mientras esperaba a que su hermana mayor la siguiera hasta la habitación de la primera valquiria.

—C-Claro... —Asintió nerviosa, frunciendo sus labios para evitar quejarse ante el fuerte ardor de su herida.

Ambas caminaron por los pasillos con tranquilidad, llegando a la habitación de la mayor de todas y entraron encontrándose con las demás.

—Bien, ya que todas nos encontramos juntas. Quisiera hablar con ustedes hermanas, sobre el Ragnarok. —Comenzó Brunhilde mostrando la seriedad tan característica de ella. —Muchas saben que la humanidad ahora corre peligro, los dioses quieren acabar con los humanos debido a sus malas decisiones con respecto a sus vidas y el daño que les hacen a la Tierra. —Agrego paseándose de un lado al otro enfrente de las doce valquirias menores a ella. —Así que decidí hacer algo, y esto es el Ragnarok. Buddha me contó sobre una técnica que podemos usar para darles ventaja a los humanos. Se llama Völundr, es la capacidad para unir nuestros corazones con un humano y convertirnos en un arma celestial que se adaptará a la forma de combate del portador. —Explicó deteniéndose un momento para mirarlas. —No prometo que podremos ganar, pero estoy segura de que darán todo para asegurar una victoria a favor de la humanidad. Estamos arriesgando nuestras vidas para salvar a los humanos. Nuestros orígenes provienen de ellos, y ahora, solo seremos su esperanza de ganar.

La quinta valquiria miro a su hermana mayor, Brunhilde mentía. Quizá si lo estaba haciendo por la humanidad, quizá si quería salvarlos. Quizá todo eso no era un deseo egoísta, pero la sola idea de creer que Brunhilde solamente estaba sacrificando la vida de sus hermanas para salvar a su novio, simplemente le revolvía el estómago.
Dándole ganas de vomitar más que la verdad de la que se había enterado. Pero guardo silencio, no estaba segura de que así fuese. La esperanza de que el objetivo de su querida hermana Brunhilde no fuese egoísta, seguía ahí.

—Lo entendemos hermana Brunhilde. —Hablo la sexta valquiria a su lado, sacando a la joven pelirroja de sus pensamientos.

Su mirada esmeralda se quedó mirando la pantalla azul que sobresalía del escritorio de Brunhilde con hologramas de los posibles candidatos para luchadores.

—Pronto comenzará el primer encuentro. Randgriz tú serás la primera en participar, de acuerdo con mis estudios tu eres la más compatible con el primer luchador. —Dijo la pelinegra manteniendo un semblante sereno, no parecía confiada, ni mucho menos preocupada por la vida de su hermana.

—Será un placer para mí, hermana Brunhilde. —Asintió con una sonrisa la nombrada.

Un escalofrío recorrió el cuerpo de Dahlia. Había algo que no la convencía, estaba preocupada, insegura. Sentía que algo saldría mal.

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