CAPITULO 6

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Los atardeceres no eligen su color, pero si el tiempo en el que tienen que salir para brillar hasta cuando la neblina y la oscuridad lo consume por completo

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Los atardeceres no eligen su color, pero si el tiempo en el que tienen que salir para brillar hasta cuando la neblina y la oscuridad lo consume por completo.

 Después de esa inesperada conversación, solo me detuve a ver el pequeño atardecer de color rojizo, tratando de buscar alguna respuesta entre sus pequeños destellos de colores. Pasaron unos minutos más hasta que decidí regresar a la casa. 

 Al menos estoy más calmada.

  No me detengo a ver nada a mi alrededor solo camino con determinación, haciéndome una idea de lo que puede llegar a pasar cuando llegue a la casa. Pueden pasar muchas cosas, pero está muy claro que este preciso momento la casa debe ser un caos total.

 Al menos, hable con el caos en persona ¿no? Continué sumergida en mis pensamientos, hasta que llegue a lo que se llama ser mi hogar.

 Hice un solo acto en abrir la puerta y ya estaba escuchando discusiones que provenían de Allerick al maestro Rou, mi padre a Elli y viceversa, pero en ningún momento escuche la voz de Amara. Me armo de valor y procedo a ver todo en la sala, vidrios en el piso y algunas armas en la mesa.

 <<Qué mierda está pasando>>

 —Ice–murmura lo suficientemente fuerte como para que todos escuchen y dirijan su mirada a donde está mirando Allerick. 

 —Alexa...–Trata de decir algo más pero lo detengo.

 << Tengo que empezar a acostumbrarme a ese nombre>>

 —No, ahora me toca a mí hablar, así que siéntense y cierren la boca— les digo de una manera firme, hacen lo que les digo de mala gana, pero Allerick fue el primero en hacer lo que pedí. 

 —¿Qué mierda les pasaba por la cabeza al pensar que iba a tomar esto de la mejor manera? – mis ojos solo los miran uno a uno— Ustedes no tienen ni la maldita idea de lo que yo pase esa semana en ese lugar, porque es algo que ninguno merece saberlo, ninguno merece saber mi dolor. —Si no tuvieron compasión al venderme, que me hace pensar que van a tener compasión al saber que porquerías me inyectaron o que tuve que pasar— ninguno me deja de mirar— pero saben que esto ya me lo esperaba, en verdad ya sabia que me habían vendido— esto último hace que mi padre solo se detuviera a mirarme de una manera interrogante.

Silencio total.

   —Pero nunca pensé que mi propia familia me haría eso, pero debí creer en él...— me doy de cuenta de lo que acabo decir y me pego mentalmente al ver como Allerick frunce su ceño y mi padre solo mira al maestro Rou, mientras que el maestro solo se queda con su semblante serio.

   — ¿Quién es él? – dice mi padre mientras se levanta para ponerse al frente mío 

 —Alguien, que en algún momento me advirtió que esto podía pasar— le respondo a media, por muy obvias razones no les voy a decir todo lo que pasó y quién era él, de igual manera ni yo sé quien es él. — Si no eres sincera con nosotros, no te vamos a poder proteger.

 —En serio están tratando de protegerme de algo que ustedes me metieron o mejor dicho me vendieron— trato decir, pero mi garganta se volvió un nudo y lo que menos quería era llorar

 —Todo lo que hicimos fue por ustedes...–Trata de decir mi padre, pero el maestro Rou lo corta con un grito

  —¡TODOS ABAJO!

  Allerick me empujo con él al suelo, acción a eso se escuchan como se activan las bombas de humo con gas que tiraban de afuera de la casa. Después de unos minutos se escuchaban como tiraban la puerta y pasos en diferentes direcciones de la casa. 

 Mi cuerpo se siente pesado, me siento demasiado débil y mis ojos se cierran por sí solos, pero aun estando débil pude visualizar a alguien agachándose en donde está mi cuerpo para cargarlo.

 —Te dije que nos volveríamos a ver, chiquita. Es lo único que logro escuchar antes de quedar inconsciente en sus brazos. 

 No sé cuál es el error que cometí para llegar a este punto de mi vida con tan solo 19 años, pero este va a ser el final y el comienzo del destino de mi vida. 



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Holaa personitas hermosas

Tantas mentiras, tanto dolor, sin embargo una sola salida...

Sean sinceros, ¿ustedes perdonarían esa mentira? 

*Arriésguense a publicar sus historias, nadie los puede juzgar por eso ;)

Besitosss 



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