𝖂𝖎𝖓𝖙𝖊𝖗𝖈𝖎𝖗𝖈𝖚𝖘

25 final

-Jimin abre los ojos... Estás soñando

-¡Jimin!

-¡Jimin!

-¡Jimin! Reacciona mi amor!

Oh~ esas palabras.

Debía de estar soñando

-éso es mi amor, abre los ojos, reacciona.

Porque debía de estarlo ¿Verdad ¿Porque había tanta claridad a su alrededor? ¿Donde se suponía que estaba?

-¿te sientes bien Jimin? Que alguien me traiga agua!

Esa voz la conocía demasiado bien pero esas manos que acunaban su rostro eran las más suaves y perfectas que pudieron haber rozado su piel, el suelo se sentía bastante aspero pero estar rodeado por esos brazos, por esos, era simplemente maravilloso.

Apenas y podía ver con claridad, todo era borroso.

-¿Porqué lloras mi amor? Todo está bien, estás a salvo, no tienes porque estar asustado mi niño.

Su cuerpo no reaccionaba ante ningún toque o dulce palabra que ese ser humano que lo sostenía le daba, estaba totalmente petrificado como roca, casi como si hubiera despertando de un coma. Sus ojos apenas podían abrirse, pesaban.

-abre tus ojos Jimin ¿Que te ocurrió? Estás temblando horrible.

La única acción que su cuerpo logró realizar por voluntad propia fue el encogerse como un bebé en esos brazos, su calor, su aroma y su tamaño eran tan reconfortantes para su alma en desgracia. Se aferró a ese cuerpo con fuerza, inevitablemente de su boca escapó un terrible llanto mientras que sus ojos lloraban desconsoladamente.

-mi niño... ¿Que te ocurre?

Ese abrazo

Oh ese abrazo... Era el que necesitó toda su vida, cuando necesito a alguien que se lo diera nadie estuvo en ese momento.

Alguien más se lo estaba dando.

-¿Te han hecho daño mi amor?

Jimin no sentía ninguna devoción en su alma por hablar, lo único que lo hacía sentirse bien era abrazar a ese ser humano ¿Así se sentía el verdadero dolor emocional?

Había perdido todo por su misma culpa y en sus propias manos, no estuvo a tiempo junto a jungkook para salvarlo, todas las desgracias que le ocurrían eran su propia culpa. Jamás en la vida volvería a ver su sonrisa, oír sus palabras o sentir sus abrazos. Había acabado con la vida del ser que más amaba tener a su lado.

-todo está bien Jimin, no llores más mi amor.

Cada momento de su vida pasó por sus ojos haciendo el dolor de su corazón casi insoportable.

-¡Deja de decirme que todo está bien!

-jimin...

Se separó de esa persona que aún no reconocía como si su presencia lo quemara, está harto de escuchar lo mismo a cada segundo, nada más que su propia vida iba a reemplazar su fatal error sin vuelta al inicio, descargó su rabia a puños en el pecho de la unica persona que le estaba mostrando un consuelo verdadero.

-¡Por mi culpa jungkook murió!

-¿De qué estás hablando Jimin?

-¡Yo lo maté, soy un asesino!

-basta Jimin, no digas éso.

No había reconocido a la persona a la que golpeaba, no tenía el valor de siquiera abrir los ojos y enfrentarse a la realidad.