KIYOPON... ¿¡LATINOAMERICANO!?

V4.16. MOVIENDOSE EN LA OSCURIDAD.

Volumen 4. Capítulo 16. MOVIENDOSE EN LA OSCURIDAD.

"Te ves bastante cansada."

Tsubasa, quien había llegado al lugar que se le citó, hizo un comentario sarcástico sobre el aspecto de su mejor amiga. En su rostro había ojeras por el poco tiempo que había dormido, su cabello desordenado demostraba lo poco que se estaba preocupando por su apariencia e incluso su ropa estaba toda desaliñada.

"Ya es la recta final. Tendré tiempo para descansar después de que ganemos el examen." Chiaki soltó un largo y sonoro suspiro.

Hasta el momento del examen de los revolucionarios, ella y Ayanokouji habían estado trabajando juntos, repartiéndose la carga de trabajo, para poder superar las pruebas especiales que la escuela estuvo constantemente lanzando.

Sin embargo, después de haberle pedido que se alejara de este examen para que ella pudiera demostrarse a sí misma lo capaz que era, él cumplió su palabra y no intervino el lo absoluto.

Eso llevó a que la carga de trabajo aumentara enormemente, mucho más de lo que cualquier persona común podría soportar.

Se sentía agotada, tanto física como mentalmente y estaba rogando por un minuto libre, pero eso era poco importante para ella. Después de haber pasado por este examen, ahora se sentía completamente realizada y lista para afrontarlo.

"¿Ya encontraste la respuesta?"

"Así es" Chiaki infló el pecho con autosuficiencia.

Todavía después de haber estafado a Tokitō, no tenía una respuesta clara a quienes eran los otros miembros conservadores. Pero al pasar toda la noche despierta, haciendo complicados procesos mentales para resolver la incógnita, finalmente encontró el camino que creyó correcto.

"Eso me alegra, ¿pero entonces porque me llamaste a este lugar?"

"No quiero actuar hasta no estar cien por ciento segura. De momento, tengo gratas sensaciones, pero todavía no puedo confirmar si estoy en lo cierto o no".

Lo complicado de este examen se basaba en las posibilidades existentes. No era un examen escrito donde podía preparar a sus compañeros, tampoco un concurso de talentos donde el margen de movimiento era limitado y mucho menos una prueba que requiera aptitudes físicas sobresalientes para superarlo.

En este examen había varias posibles respuestas y ninguna era errónea, aunque tampoco válida, hasta el momento en que se comprueben. Desde el inicio, la escuela daba una pequeña pista a los alumnos. Pero eso era insuficiente para encontrar la respuesta, lo que hacía altamente probable el cometer errores.

Eso obligaba a los estudiantes a buscar más pistas. Evidentemente, la primera opción fue dentro de la misma clase. Si todos trabajaban juntos, era posible encontrar otras similitudes entre sus miembros conservadores.

Pero, nuevamente, eso era insuficiente.

Aquí había dos opciones. La arriesgada era jugársela e intentar adivinar con lo que se tenía. Y la conservadora, pero no menos atrevida, era buscar pistas en el siguiente nivel: las demás clases.

Obteniendo pistas mucho más sustanciales, Chiaki logró encontrar un patrón que la convencía.

Estaba segura de tener la respuesta correcta, pero analizando la situación, se dio cuenta de que solo tenía la mitad de sus problemas resueltos.

A estas alturas, cualquier pequeño error podría ser fatal. Y las consecuencias, por todo lo que implicaba, serían más dolorosas para todos.

Por eso, antes de actuar soberbiamente, decidió asegurarse de estar en lo correcto.