III.- adaptarse.

858 74 31
                                    

   iii.- adaptarse.

 Era bastante tarde en el departamento cuando Dipper despertó, no estaba en su cama, eso seguro, ya que en primera alguien lo estaba abrazando, y en segunda le dolía terriblemente la espalda. Después de estar un rato sin moverse procesando información, logró percatarse de que el chico era Wirt. Y se percató de un bulto en la parte baja de su espalda, no quería saber si era lo que el creía que era. Trató con cuidado de separarse de el otro a lo que el chico a su espalda respondió con un gruñido y una mueca, aún así no despertó, pero dormido lo atrajo más hacia sí, Dipper sentía la erección matutina de el otro en su espalda y no podía estar más rojo. No le quedaba de otra ya.

—Uhm, eh, Wirt, despierta. —Dijo meciendo al otro levemente. Parecía que Wirt tenía el sueño pesado. Lo movió bruscamente para que el mayor se despertara.

—Dejame dormir. —Refunfuñó.

—Vale, pero primero sueltame.

Wirt ante esas palabras abrió los ojos de golpe y se sonrojó casi tanto como Dipper. Lo soltó a penas procesó bien la situación.— Lo siento, uhm... voy al baño. Permiso. —Dijo levantándose y yendo hasta el cuarto de baño.

—Tres de la tarde, diablos. —Dijo cuando ya pudo separarse. Tenía que planear bien todo desde ese momento, ahora iba a tener a Wirt con él y sabía que su vida cambiaría al por fin tener a el mayor consigo. Y lo que había pasado hace un rato lo demostraba.— ¡Wirt, iré a un teléfono público, no demoro!

Debía cambiarse de casa, eso seguro, no podían vivir en un departamento tan pequeño, por suerte gracias a su trabajo podría conseguir lo que quisiera con sólo pedirlo. Y claro trabajando un poco más. Debía comprarle cosas básicas al otro, ropa, un celular y buscarle un trabajo, lo último no porque a Dipper le interesara el dinero, pero no iba a tener encerrado a Wirt mientras él salía, debía hacer que su vida fuera medianamente normal. Tenía que vender ese departamento, así que lo empezaría por limpiar ese mismo día. Debía volver a sacar sus documentos. Y lo más importante; tenía que contarle a todos sobre el regreso del otro castaño.

Bajó a un teléfono publico a hacer llamadas a su jefe, él dijo que podía tener su nuevo hogar en un par de días a cambio de un par de trabajos que Dipper aceptó inmediatamente. Todo por que él esté bien, pensó. Dijo que ese mismo día mandaría por correo un nuevo celular, sus documentos, y algo de dinero para el resto del mes, pero no podía conseguirle un trabajo a Wirt, no era algo difícil así que a Dipper no le importó mucho.

Satisfecho el castaño dio las gracias y se despidió, dispuesto a subir al 5to piso dónde vivía, para asear y empacar unas cuántas cosas, conociendo a su jefe, probablemente para mañana mismo tendría una casa.

Al entrar no pudo evitar sonrojarse al recordar la escena, pero borró eso de su mente de inmediato. Era imposible que siguiera conservando sus sentimientos por el mayor desde hace tantos años. No era normal. Le era imposible tener que seguir poniéndose nervioso cerca de él, sonrojándose hasta las orejas y teniendo esa necesidad de besarlo. Sus pensamiento fueron interrumpidos por el mismo causante de estos.

—Hice almuerzo, dudo que vayamos a desayunar a estas horas, ¿no? —Le sonrió poniendo dos platillos de fideos en la mesa.

—Gracias. —Le sonrió de vuelta.— ¿Cómo puede seguir como si nada luego de lo que pasó? No es como si fuera tan importante pero... agh. —Pensó. Negó con la cabeza, no tenía porqué pensar en eso.— Mi jefe nos conseguirá un departamento más grande para mañana. Debo empacar y dejar limpio este para venderlo luego. También iremos a comprarte algo de ropa y un celular luego de comer, lo de los documentos deberás verlo con tu madre, ya que supongo que ella tiene los antiguos. Pero ya veremos eso luego. Me mandarán algo de dinero y un nuevo celular, haré llamadas y nos reuniremos en casa de tus padres en la noche. Ya veremos lo demás. —Dijo enumerando cada cosa, para cuando terminó de hablar echarse a la boca algo de comida.

Fuera de lo desconocido. [Pinescone español]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora