V.- hogar.

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[ Escuchar la música es opcional. ]

v.- hogar.

 Los señores de la mudanza llevaban todo a el camión, ya no quedaba más que guardar las cosas básicas que habían dejado fuera, Wirt y Dipper estaban muy metidos en hacer eso.

 El menor ordenaba varios papeles en un mueble, pero de pronto una carta cayó al piso. Cuando Wirt intentó recogerla Dipper se la arrebató de las manos.

—No. Toques. Eso. —Dijo muy molesto.

—¿Dipper? ¿Qué es eso?

—Nada importante. —Dijo guardándola en sus bolsillos.

—Si no es importante, ¿Por qué te pones a la defensiva? —Cuestionó.

—Nada, no importa, sigamos empacando, falta poco. —Dijo restándole importancia al tema.

—Está bien... —Obedeció. No sabía qué tramaba Dipper ni por qué escondía esa carta, pero sólo siguió empacando.

 Siguieron por una hora aproximadamente empacando, después de un rato había quedado olvidado el asunto de la carta e incluso de vez en cuando Wirt reía al encontrar fotos de Dipper cuando era demasiado pequeño, Dipper sólo se sonrojaba y le regañaba, pero no se enojaba en serio como con la carta.  Cuando ya acabaron echaron las ultimas cosas al camión y se fueron ellos en el auto de Sara que se había ofrecido a llevarles, aunque sólo los dejó en la entrada porque se debía ir a su trabajo.

  Subieron cuando ya confirmaron haber entrado todas sus cosas al departamento, quedaba en el centro de la ciudad, lo cuál era bueno porque más cerca estaban de sus amigos y familiares. Un señor que tenía muy mala pinta le entregó las llaves a Dipper y se fue, el castaño agradeció a los hombres que habían ayudado más ellos solo se fueron lo más rápido que pudieron. 

  —¿Y bien? ¿Entramos? 

—Uh... No lo sé...

—No te eches atrás ahora, Wirt. 

—Ehm, está bien, entremos. —Dijo mostrándole una pequeña sonrisa, estaba emocionado, pero aún se sentía inseguro de volver a la ciudad. 

 Quedaba en el último piso, lo cuál era sospechoso para Dipper, pero no dijo nada, cuando entró, no era lo que se esperaba, era un penthouse.  ¿Por qué diablos su jefe le consiguió un penthouse? Él sólo quería un departamento normal, y una vida normal, pero cada suceso que pasaba en su vida le hacía ser una persona cada vez más fuera de lo común.

 —Yo, Wirt... —Dijo mirando al otro algo preocupado, estaba mirando con los ojos abiertos como platos el departamento.— Lo sie-...

  —¡Es fantástico! ¿Cómo lo conseguiste, Dipper? Espero que no tengas que trabajar mucho por esto, es asombroso, en serio. —Dijo entusiasmado, viendo el lugar de lujo que ahora tenían, había una amplia cocina, con bar incluido, una chimenea sintética y sillones de diseñador, tenían una terraza con piscina, no podía imaginarse algo mejor, más Dipper estaba algo incómodo porque él realmente no quería vivir con cosas tan lujosas.

 Ya qué, pensó el castaño.— ¿Quieres ir a ver las habitaciones? Escoje la que quieras. —Le animó. 

—Está bien. — Dijo sonriente yendo a ver las habitaciones. Dipper fue a la cocina y vio la gran nevera que había, tenía una nota adhesiva verde.

"Como verás, el departamento viene equipado, doné tus muebles a la caridad. Las demás cosas están en las cajas, ropa y cosas personales. De nada. —tSotBE"  

Fuera de lo desconocido. [Pinescone español]Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum