16: Cuidado.

20.3K 1.1K 174
                                    


25 de Julio.

Acuario de Sydney.

—Hay diferentes horarios para los shows, así que ustedes pueden elegir, vamos al show primero o adentro del acuario— Comentó el señor Hullbert, al final todos acordamos entrar primero al acuario.

Lo primero que ves cuando entras es un enorme túnel, rodeado por agua y peces de todo tipo, es un espectáculo increíble.

— ¡Miren! ¡Es Nemo! —Dijo Liam señalando un pequeño pececito.

—Que inmaduro eres, Li— Le dijo Karly.

—Oye, a mí no me tienes apodo— Le dije y ella sonrió pensativa.

— ¿Qué te parece si te llamo atún?

— ¿Atún? ¿Qué clase de apodo es ese?

—Si digo atún vas a voltear—Dijo.

—Claro que no.

—Mira, ahí hay un atún—Dijo mi hermana.

— ¿Dónde? —Pregunté emocionado y todos los que iban con nosotros en el viaje comenzaron a reír, rodé los ojos y reí también— Bueno, tal vez sí volteo, pero no quiero ese apodo.

—Dime como te gustaría que te llamara— Dijo ella tomando mi mano, Liam hizo un sonido raro en el fondo y yo me sonrojé— Aw, te has puesto rojo.

—No es cierto— Gruñí.

—Te diré bebé gruñón.

—No, solo bebé.

—Bien, bebé.

Me giré hacia los peces, no quería que viera mi sonrisa de tonto, sentí un cosquilleo por todo mi cuerpo, era un sentimiento raro pero se sentía muy bien.

—Menos charla y más acción caminen que hay gente que viene detrás de nosotros —Dijo el señor Hullbert.

—Ya ves, hasta tu tío quiere más acción—Le dije al oído mientras caminaba detrás de ella.

Sonrió y me miró, luego me besó por unos instantes, me dejó completamente atónito, al igual que a mi hermana y a Liam, que estaban boquiabiertos. Luego siguió caminando, dejándome atrás.

Entramos a lo que parecía un cuarto enorme lleno de gigantes peceras, las cuales estaban a su vez llenas de peces.

—No sé qué me da más vergüenza, que tengan aquí a los peces en cautiverio, o que yo esté aquí viéndolos mientras son privados de su libertad— Dijo Karly.

—Bueno, se supone que es un refugio, no los lastiman—Le dije.

—Lo sé, pero ¿por qué razón están aquí?, porque allá afuera no están seguros, cuando no debería ser así, deberían poder estar en su verdadero hogar sin un peligro...

La miré tratando de averiguar que era lo que pasaba por su mente en ese momento, aparte del tema de los peces.

—Mira, ¡Un atún rojo gigante!

—No voy a caer esta vez—Le dije sonriendo engreídamente.

—No, de verdad, míralo es muy lindo ¡y gigante!

—No voy a voltear...

— ¡Mira eso! Son sus hijos, creo.

—Karly...

—Bueno, piérdete el espectáculo.

Voltee para mirar finalmente. Y en frente de mí tenía a un atún rojo de dos metros de largo, era completamente hermoso. Al lado iban unos pequeños atunes bebés. Era una imagen muy tierna.

Angelic Organics (h.s.)Kde žijí příběhy. Začni objevovat