¡Demigod Survive!

¿Percy?

Clarisse POV:

Desperté por un golpe en la cabeza. Tome mi arma dispuesta a enfrentarme a mi agresor, pero resulto ser solo una manzana. Camine un rato cuando al fin me topé con el río y una escena interesante: Jackson siendo acosado por una náyade.

Me escondí detrás de unos arbustos donde pude disfrutar toda la escena.

"No, en verdad no"

"Y es cierto que los hijos del Dios del mar pueden respirar bajo el agua"

"S...Si" tartamudeo en lo que guardaba sus pertenecías. "Sabe...es, ya m...me tengo que ir...r"

"¿Por qué no mejor te quedas conmigo?" tuve que taparme la boca porque si no reiría como loca y lo echaría todo a perder.

"Me gustaría pero será mejor que me vaya. Ahora"

"Oh, vamos" dijo la náyade cruzándose de brazos. "Yo sé que te quieres quedar y yo aún más quiero que te quedes"

"En serio, no estoy interesado. Adiós" Prissy salió corriendo lejos de la náyade (la cual terminó indignada). Después de que la náyade se sumergiera de nuevo en el río no pude resistir más y me tire de risa. Cuando regresemos tengo que pedirles una copia a los Dioses.

Continué mi búsqueda río arriba hasta que al fin di con una cueva. Estaba junto al río, un poco escondido entre las plantas. Era amplia, lo suficiente como para tres personas y se veía bastante cálida. Entre y revise un poco, no parecía filtrarse el agua y con un poco más de barro y algunas plantas podría crear un buen camuflaje.

Campamento POV:

El resto de aquel día no fue tan interesante. Clarisse se terminó de instalar en la cueva, Nico y Percy vagaban sin tratar de llegar a un punto en específico y Thalia y Annabeth terminaban su campamento.

Terminando el programa todos los campistas se dirigieron a sus cabañas algo decepcionadas.

Annabeth POV:

A la mañana siguiente desperté por un ruido de entre los árboles. Tome mi cuchillo y me coloque en posición de defensa. Un pájaro salió del árbol. Suspire. Es solo un ave... Un segundo ¿Sólo un ave? Pero... corrí hasta el árbol y comencé a examinarlo. Nada, solo hojas. Busque entre las plantas y no había rastro alguno de comida. Debió ser algún truco de los Dioses. Luego otro pensamiento cruzó mi mente. Si no hay comida y ahora hay animales ¿Tendremos que cazar? Una flecha paso frente a mis ojos. Thalia sostenía su arco y recogía al pájaro (ahora con una flecha atravesándolo) del suelo. Thalia traía el pelo desordenado y se veía irritada.

"Estúpido pájaro ¿por qué tenías que hacer tanto ruido?" Me quede pensando cómo es que no lo había oído. Alejando ese pensamiento le conté acerca de la comida. Ella alzó la flecha con el ave antes de decir: "Que suerte la nuestra, podríamos comer de aquí ¿No crees?"

Antes de poder contestar un ruido llamo nuestra atención. A nuestros pies cayo una persona con su espada en mano. Su cabello negro estaba más desordenado de lo normal y sus ojos verdes azulado veían hacia un punto fijo.

"¿Percy?"

"Yo..."

Entre las platas se oyó un silbido antes de que saliera una cosa enorme con la piel curtida y múltiples cabezas de serpiente, por lo menos catorce, todas retorcían en diversas direcciones.

"¡Hidra!"

En unos momentos les subo el siguiente capítulo;)