Capítulo 16

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- ¡Vine apenas pude! ¿qué pasa Sorato?

- Toma asiento, Hibiki - el tomó asiento, yo tome un poco de té.

- Ya, me senté, ¿que paso? - dice ansioso.

- Necesito que me ayudes... - viene la garzona y me deja una bandeja de galletas - gracias, preciosa - le pegue en el culo y ella salto asustada.

- Tú no cambias... ¿En que puedo ser útil, mi estimado amigo? - saca una galleta de chocolate.

- Necesito que localices a mi ex - dije con una mueca de desagrado.

- ¿Cuál, Laura, Prim, Sora, Ester? Dime, yo haré lo que pueda... - su cara era bien pervertida, debo de admitirlo.

- No, ninguna de esas. Quiero que me ayudes a comunicarme con...

- ¿Con...? - Hibiki esta ansioso, lo noto. Su mirada se vuelve sería y comienza a jugar con sus dedos.

- Con Meredy, necesito hablar con ella - Hibiki tomaba una taza de té, y lo escupió todo, en mí cara - gracias, mi cara estaba seca.

Use mi magia y saque el agua de mi maravilloso rostro, y mire a Hibiki que, estaba aún con la trompa estirada - ¿no vas a decir nada?

- ¿Meredy? O sea ¿rili? ¿Remember? - a él nunca le cayo muy bien Meredy, jamás le agrado.

- Jamás, nunca jamás volveré con ella - me cruce de brazos.

- Entonces, ¿por qué quieres comunicarte con ella? - dice cruzando las piernas.

"Es que no le incómoda, ¿verdad? Yo hago eso y me duele u.u"

- Necesito conseguir información sobre Jellal Fernández, Necesito saber de él.

- ¿No es más fácil hacerme buscar a él en vez de Meredy? - dice sonriendo.

- No, aún no. Necesito recolectar la suficiente información como para hablarle cara a cara, y para eso esta Meredy -. Comencé a comer las galletas y a tomar té - ¿lo harás?

- Estoy en ello - de la nada aparecieran las pantallas, que demuestra que mi primo esta haciendo su magia - por mientras, ¿me recuerdas por qué terminaste con Meredy?

- Primero: me obligaba a darle de mi chocolate, ¡y eso para mi es pecado! Va en contra de mi religión, el chocolate no se comparte ni con tu madre. Va en contra de mi creencia más sagrada - Hibiki sólo reía - ¿que?

- Es que deberías de dejar de comer tanto chocolate, y empezar a comer fruta, ¡cosas sanas! - movía pantallas mientras reía.

- ¡EL CHOCOLATE ESTA HECHO DE CACAO, Y EL CACAO SALE DE UN ÁRBOL, ENTONCES EL CHOCOLATE ES UNA FRUTA! - me puse de pie en la silla y pose manera triunfal.

- Ya, claro, PUF, todo el rato Sorato - saco otra pantalla - ¿que más?

- Segundo: cuando a ella le llegaba el "Andrés" usaba su magia para hacerme sufrir de lo duro. ¡¿Como vergas las chicas pueden vivir ese calvario una vez al mes?! Es que son unas heroínas wey, eso si es difícil de asimilar.

- O sea, si yo fuera mujer y tuviera esa magia, lo haría. Si me dice quererme, ¡que me quiera hasta cuando se harte! - aparto las pantallas para que yo viera la cara (que no era la gran maravilla), para luego volver las pantallas a su lugar de origen.

- Y por cosas que en este mismo momento, no recuerdo. ¿Como vas?

- Ya casi término, es buena, a donde va no deja rastro alguno. Pero, ¡JA! no contaba con mi astucia.

- Como digas... Mientras la encuentres y me comuniques conmigo, yo sere completamente feliz.

- Y mientras, ¿como va tu trabajo?

El cupido de Fairy TailWhere stories live. Discover now