Capítulo 3

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Le debía un favor al maldito de Alex asique tuve que viajar hasta Estados Unidos a una especie de subasta, la verdad me parece denigrante e inhumano que vendan a mujeres a cualquier hombre. Pero Alex me pido que lo hiciera, parece que la chica le cayó bien y prefería que estuviera en mis manos que las de otro hombre.

Luego de bajar del avión el calor agobiante golpeo con brusquedad mi cuerpo. Me dirigí hasta la casa de Alex, para esperar la hora de la subasta.
Nos conocimos  gracias a que nuestros padres que tenían negocios en común que por supuesto eran una fachada para tapar todos los negocios ilegales que tenían. Nos hicimos grandes amigos. El dinero, el alcohol y las drogas no faltaban los fines de semana sin contar el innumerable número de chicas que pasaron por nuestra manos,  las fiestas eran una locura, y fueron buenos tiempos hasta que volví a mi ciudad natal.

Ya pasadas las 20:00 p.m. me dirigí hasta el lugar. Al entrar el olor a alcohol y a tabaco inundo mis fosas nasales, solo quería tomar a la chica e irme lo más rápido posible, la verdad es que detesto este tipo de encuentros. Habían mujeres desnudas por todos lados mientras hombres que podían ser sus padres hasta sus abuelos que las manoseaban.

Entre a la sala VIP, es aquella donde solo están los compradores. Empezó la subasta y mujeres demasiado jóvenes estaban en esa tarima de vidrio con muy poco ropa y tambaleándose es más que seguro que estaban drogadas, apenas podían mantenerse en pie. Lo único que sabía de la chica es que se llama Elza y que tiene el cabello rosa, solo espero que sea la única.

Siguieron pasando chicas y hombres que las compraban, hasta que anunciaron su nombre y la verdad es que no sabía que esperar. Pero cuando salió no lo podía creer, era realmente hermosa de estatura media, piernas largas, abdomen plano, senos medianos, pelo rosa largo, pestañas largas y sin contar la hermosa y redonda cola que tenia.

Mire a mi alrededor y no era el único que su belleza había cautivado, asique puse la apuesta máxima y la compre de inmediato. La mayoría de los hombres de la sala se negaban a aceptar que la había comprado pero las reglas son las reglas, yo fui el primero y mi apuesta fue tan elevada que no pudieron negármela .

Vi cuando le pusieron un pañuelo en la boca y se desmayó al instante. La subimos a mi carro y nos dirigimos a la casa de Alex. En todo el viaje estuvo inconsciente, seguramente demasiada droga le dieron para que este en este estado.

La bajamos y la llevamos a mi habitación le saque la ropa y la bañe, mientras la bañaba pude apreciar su belleza

-Realmente es hermosa -  pensé

La seque y la vestí con ropa que Alex me había traído y la acosté en la cama. Me duche ya que aún tenía ese olor horrible de ese lugar y me acosté junto a ella.

Había reservado un vuelo privado para las 8:00 a.m. Así que a las 7 me levante y apronte todo para nuestra partida. Uno de los guardias de Alex la llevo hasta la camioneta y la deposito en los asientos traseros. Conduje hasta la pista privada la bajaron con cuidado aún seguía dormida y subimos al avión.

-Al fin vuelvo a casa. -dije con una sonrisa en mi rostro.

Vendida al mejor postorWhere stories live. Discover now