1.

18.3K 1.1K 130
                                    

Toqué el timbre de la casa de Dylan. Para los que se preguntan quién es Dylan, es mi sexy vecino, amigo de mis hermanos y...un rompecorazones. Sí, una lástima, pero necesito de sus consejos. Ser popular no es tan fácil.

Se escucha el cerrojo de la puerta de madera, y poco después se asoma por ella el chico de ojos cautivantes y sonrisa encantadora.

Lo siento, déjenme corregirlo...se asoma un Dylan dormido con cabello revuelto y sin camisa.

-¿Irina?-pregunta frotándose los ojos.

-Así me llamo. Te necesito-eso es lo bueno de mí, voy directo al punto.

-Wow, sí  que estás desesperada-sube y baja las cejas con su típico toque pervertido.

-No es eso idiota, necesito ser zorra-¿qué? ¡Dije que era directa, no clara!. Él comienza a reírse pero al ver que no es ningún juego para y murmura un "¿Cómo? ¿Por qué? Espera, ¿Qué?"-Es para un proyecto social de la escuela, necesito que me conviertas en una zorra.

-No sé si aún sigo dormido o...¿sabes qué? pasa-se hace a un lado dándome entrada a su departamento-Explícate.

-Mira, necesito que me ayudes a actuar como zorra, voy a fingir ser parte de los populares, será algo así como un experimento-le sonrío y espero alguna reacción de su parte. Él frunce el ceño, luego suelta un suspiro frotándose la cara con sus palmas y finalmente se sienta en un taburete de madera.

-Déjame ver si entendí, ¿quieres mi ayuda para actuar como zorra por un proyecto de la escuela?-asiento-Ira, tienes él aspecto de una inocente niñita y seguramente nadie te ha tocado un pelo en tu vida, ¿cómo planeas que te ayude?-pregunta usando mi sobrenombre al principio de la oración. Odio ese sobrenombre, hace parecer que soy una persona que necesita ir a control de ira o algo así.

Me siento un poco ofendida por su descripción hacia mí, pero claro, él realmente no sabe nada de mí, ni se lo imagina.

-¡Sólo necesito que me ayudes a cambiar, Dylan!-insisto.

-¡De todas formas aún eres virgen! Las zorras de nuestra secundaria se acuestan con quien se crucen, ¿cómo esperas sobrevivir un día sin que se den cuenta de ese pequeño gran detalle? ¿Cómo te adaptaras a ellas?. No digo que debas acostarte con alguien, pero notarán todo cuando tengan una sus "conversaciones de chicas" y no sepas cómo seguirles el hilo de la conversación.

-¡Dylan no soy virgen! ¡¿Bien?! ¡Problema resuelto!-oh no, lo dije.

Lo dijiste.

Calla conciencia, no es momento.

-Per... espera ¿qué?-se corta a sí mismo y me mira confundido y aterrorizado. ¿Cuál es su problema ahora?

-Por favor, Dylan, solo necesito que me ayudes con la ropa y costumbres populares, tú eres uno de ellos-evado el tema y le mando "mi mirada". Se trata de un truco que aprendí de pequeña, hace que mis ojos se vean más brillosos e incluso algunos dicen que se me dilatan las pupilas.

Me hace parecer más adorable. ¡¿No es increíble?! Toma eso bitch, soy como un gatito.

-Bien. Pero esto quedará en secreto ¿okey?. Tus hermanos me mataran si se enteran-asiento efusiva mientras él me da un lápiz y un anotador-Anota lo que te diga.

-Uhum-hago un sonido de asentimiento y deslizo el lápiz en la hoja anotando las palabras 'Pasos para ser una zorra' en ella.

-Paso 1; el cuerpo lo tienes, solo que la ropa que usas no te favorece, tienes que ponerte otras cosas, te llevaré de compras por un cambio, pareces una anciana-a veces me pregunto si Dylan es gay... luego recuerdo que es uno de los más conocidos mujeriegos en toda la secundaria y me doy cuenta de mis erróneos pensamientos.

Lo miro ofendida, ¡¿anciana, yo?!.

Se pone una chaqueta y agarra un llavero que resuena en el aire golpeteando con sus llaves.

-¿A dónde vamos?-pregunto siguiéndolo-oye ni siquiera tienes puesta una remera.

-Para eso sirve la chaqueta, duh. Vamos al centro comercial-responde no muy detallado mientras nos subimos a su auto.

-¿Y luego qué sigue?-curioseo cortando el incómodo silencio.

-Paso 2; aprender a usar tacones, porque dudo que sepas. Paso 3; ser la sensación, eso es todo por ahora, luego de que logres todo eso te digo lo demás-explica sin quitar la mirada del frente.



-No, no, no, no, no me pondré eso-negué. Me encontraba en una tienda llamada M&S con Dylan sosteniendo una falda en rojo carmín extremadamente corta delante de mis ojos.

-¡Oh, vamos! Es solo una falda, es lo que siempre llevan las chicas populares-se queja.

-Dylan, quiero probar que las inocentes podemos ser populares y ardientes también, no que me abriré de piernas al que vea delante de mí-aclaro.

-Bueno, yo estoy delante de ti ahora y no me molestaría si te abrieras de piernas-me guiña. Ruedo los ojos y voy hacia una sección donde hay shorts ajustados.

-Quiero ser diferente. Quiero ser zorra, pero no quiero depender de una falda para que los demás caigan-comienzo a explicar parando me delante de él-Quiero ser un reto para ellos, algo que valga la pena conseguir. Quiero que luchen por conseguirme, ¿Comprendes?

-¿Segura que quieres ser zorra? Podrían darte el puesto de poeta-murmura acercándose y dando leves caricias a mi brazo. Me extraña su comportamiento ¿qué pretende?-Por lo que entiendo, quieres ser zorra, pero quieres ser difícil. ¿Algo así como una chica rebelde y seductora?

-¡Exacto!—me lanzo en un abrazo que el recibe sorpresivo-Lo siento, fue un impulso—excuso separándome de él.

Al quedar cara a cara puedo ver una sonrisa extendiéndose en sus labios mientras un brillo especial abarca ahora sus ojos miel. Él asiente y aparta la mirada, con la cual segundos antes se me hacía inevitable e increíblemente adictiva por una razón desconocida.

No tan desconocida...

-Bueno, hay que seguir-aparta los brazos de mi cintura y...¿Hace cuanto los tenia ahí?

¿Por qué eres tan despistada? Un día de estos alguien te raptará y tú dirás "oh, ¿hace cuánto estoy atada y amordazada?"

-De todas formas, creo que ya tengo suficientes prendas por ahora-comento deteniéndolo.

-Pues entonces vamos al salón por el corte de cabello-asiento con una sonrisa embobada por un chico lindo que pasa a mi lado, hasta que vuelvo a la tierra y logro captar lo que insinúa.

-Espera, ¿el qué? ¡Ah, no!-trato de correr, pero él toma mi cintura y me sube a su hombro como si tuviera el peso de una pluma-¡Dylan, suelta! Bájame ahora-puedo ver como salimos del local y nos dirigimos a una planta más arriba-¡Bájame ya, no harás nada con mi cabello!-me opongo sin dejar de gimotear y patalear.

Desde pequeña me ha gustado mi largo cabello, jamás dejaba que me lo tocaran, mi cabello es sagrado para mi.

-Deja de moverte, Irina. No conseguirás nada, son como cosquillas-hasta engreído me ha salido el chico.

-¡Ayuda! ¡Quiere violarme! ¡Es un violador!-comienzo a gritar mientras una anciana pasa por nuestro lado con un condón en la mano y murmurando un estos niños pervertidos de hoy...-¡Hey, anciana, que es usted la que lleva un condón en la mano! ¡Sí, le digo a usted, no me mire así!-la mujer abre los ojos y se va corriendo y chillando por todo el lugar.

-¡¿No podías aguantarte verdad?!-pregunta Dylan bajándome frente a la puerta de un salón de belleza.

-Si me hubiera aguantado no sería yo misma-comento dándome la vuelta para huir, pero el sostiene mis hombros y me empuja hacia adentro.

Oh, lo que me espera.


¡Hey! ¿Les está gustando la historia?

Bueno sólo les escribía para decirles que aún no tengo decidido quienes serán los que interpretan los personajes, pero en cuanto lo sepa se los digo ;).

Hasta el próximo capítulo.

brave_lion, fuera.

Proyecto Zorra Donde viven las historias. Descúbrelo ahora