Cien días sin ChanYeol »ChanBaek

Quattro

Había una época en la que había unas cajas de almacenamiento llamados cassettes, era común que en uno de ellos se guardaran algunas canciones entre las cintas, eran color negro y por lo regular podían ser ocupados ambos lados de esa cinta. Era divertido grabar en el reverso algunas otras canciones y guardarlas como si fueran un secreto; ChanYeol había hecho eso la mañana del día anterior y nunca pensó, que justo la canción que había grabado le traería miles de recuerdos confundiéndolo y al mismo tiempo, trayendo consigo nostalgia tangible de nombre BaekHyun.

LuHan movía sus pies como si fuese un niño, él no alcanzaba el suelo dado a que la camilla de hospital en la que estaba era muy alta. Tenía un vendolete cubriendo una parte de su ceja y sien, también unos raspones y moretones en la cara que lo hacían ver aún más lindo, como si fuese de esos chicos que pelean fuera de las escuelas; sin embargo él no estaba ahí por una pelea de adolescentes, si no, por haber conducido en estado etílico y chocar contra otros autos. Su padre y hermano fueron avisados por BaekHyun para ir por él y pagar su fianza, también los acompañó BaekHyun para que LuHan no fuera terminado muerto entre las manos de su padre que se veía un poco molesto.

Llegaron a urgencias, dirigiéndose luego a un pasillo donde regularmente se dejaban algunos pacientes que aún no tenían un cuarto, les habían dicho que en ese lugar se encontraba LuHan. Y ahí estaban, el señor Huang, su hijo menor ZiTao y BaekHyun, que casi corría de lo rápido que caminaba el señor.

El chico semi suicida sacando medio hígado por tratar de alcanzar al señor Huang, cuando le agarra el paso éste ya se ha detenido y casi se va de boca contra una de las paredes. LuHan alza la mirada junto con una sonrisa y su padre frunce más el ceño.

— El Audi está bien, sólo tiene una rayita chiquita.

— No quiero excusas, pagaré tu fianza pero mañana mismo me pagarás ese dinero LuHan, ya eres mayor para estas cosas –reta el señor Huang, BaekHyun rápidamente mira en todas direcciones-

— Está bien papi.

— ¿Sólo eso? –exige ZiTao tomando una foto de LuHan en la camilla- Yo que tú le quito las llaves, los permisos y el depa de Wangfujing [1] digo...

— No me ayudes Tao...

— Tienes razón tu hermano. Es un castigo por todo esto, levántate y vamos a ver lo que hay que pagar –el hombre mayor se gira hasta dar con un BaekHyun curioso- Gracias por avisarme que estaba aquí ¿Quieres que te lleve en el camino a tu casa?

— ¿Perdón qué? Ah, gracias señor Huang, pero quedé con alguien de verme aquí

— ChanYeol se fue antes de que llegaras –interrumpe LuHan, BaekHyun hace una mueca al escucharlo- me dijo que ya era muy tarde.

— ¿Escuché el nombre de ChanYeol?

— Luego te cuento Tao... -LuHan baja de la camilla y se apresura unos pasos- lo siento Baekkie

— No te preocupes, espero que estés mejor

— Te lo agradezco ¿te vas a quedar?

— Si, tomaré un taxi.

La familia Huang se despide del trabajador social que mira su paso entre aquel reducido espacio del hospital, se pregunta cómo es que el padre de LuHan puede ser tan condescendiente con él, pero luego recuerda a sus propios padres y el pensamiento desaparece fugazmente dejándolo con el cerebro en blanco, es cuando sabe que ya no tiene nada más que hacer ahí, al día siguiente tendrá seguramente un poco de papeleo y no desperdiciará más horas de sueño, pero justo cuando va a tomar su camino de vuelta a la salida, su mirada se concentra en el uniforme blanco de un hombre que va caminando hasta él, tarda algunos segundos en identificarlo hasta que ambos comparten una sonrisa.