Cien días sin ChanYeol »ChanBaek

Cinque

Ed, Ed, Ed... que caprichoso, ah. Y yo que te consiento haha. Te lo dedico.

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Uno a uno en orden sus dedos tocan la madera haciendo un sonido muy bajo pero con ritmo, es curiosa esa forma en que hace que una melodía sea compuesta con tan sólo golpeteos en la superficie de la mesa de noche, ChanYeol tiene un par de versos en la mente que no puede sacar y le gustan, los repite porque no hay más composición que esa, pero aun con ese trozo de canción su cuerpo y mente se mantienen más relajados.

Son las ocho menos quince, el sol ya ha salido hace unos minutos pero no logra iluminar por completa la habitación, además, la ventana es tan pequeña que ni si quiera la luz se atreve a entrometerse a la mediocridad de tristeza que tiene ChanYeol, él lo llama "tiempo de composición"; los artistas son siempre egoístas y egocéntricos, todo el tiempo queriendo ocultar sus ideas y no compartirlas hasta que crean que es la perfección, pero hasta eso es un chiste ¿qué es perfecto? ¿Qué sería una obra de arte sin imperfecciones? A ese punto llega la mente creativa y suicida de un hombre que no pasa de los treinta, pero se siente de cincuenta. Así son los corazones viejos.

Abandona la cama cuando las letras en sus labios ya contienen un significado y una dedicatoria, se cobija con una de sus grandes sudaderas, la prenda seguía impecable dentro del armario, corre a la puerta y con más decisiones así, ChanYeol termina por salir de la habitación. Mira a todas partes intentando dar con BaekHyun, pero no lo encuentra en su campo visual, da dos pasos hacia la cocina y un ruido proveniente del baño le hace dirigirse ahí. Lo sabe, son susurros y uno que otro ruido seco, no lo conoce, ese sonido no le es si quiera familiar y antes de girar la perilla se escucha con más claridad cómo es que BaekHyun está dentro.

— No estoy seguro... pero será lo mejor. –hace una gran pausa y ChanYeol pega la oreja a la puerta, quizá así pueda escuchar mejor; BaekHyun habla por el teléfono celular- Si YiXing, no te preocupes estoy mejor. –al lado de la línea el hombre chino le pregunta por enésima vez si es verdad que está bien y BaekHyun aprieta el teléfono en sus manos tratando de responder sin que se le quiebre la voz, pero falla. ChanYeol entiende ahora que ese sonido que no se le hacía conocido, era BaekHyun llorando.- Debo colgar, te veo pronto. También te quiero.

Un sonido agudo y fugaz le indica a ChanYeol que el menor ha colgado, el trabajador social tarda en salir ocho minutos más. Cuando abre la puerta se encuentra con el rostro de su ex novio viéndolo con tristeza y entonces toda esa debilidad regresa a ser una barrera ante ChanYeol que suspira por saber lo que viene.

— ¿Me espiabas?

— No, acabo de llegar –miente- ¿Qué tienes en los ojos?

— Nada –BaekHyun pasa de largo al lado de ChanYeol mientras se acerca al sofá donde antes pasó la madrugada, el silencio se hizo partícipe del momento, era un poco frío desde ese punto- Hay comida en el refrigerador y el agua del baño está caliente por si quieres tomar una ducha, tu ropa sigue en el armario, está limpia.

— Gracias.

— No hay de qué, tengo que irme a trabaj... -BaekHyun detiene su habla cuando ChanYeol le ha rodeado en un abrazo por la espalda. Siente el mentón del más alto descansar en su cabeza. Ninguno dice nada ni se mueve, las palabras faltan pero a la ves sobrarían si dejan que las cosas sigan de ese modo, una mente confusa nunca es sana.- Chan...

— Te amo.

— ChanYeol

— No llores.