Verdad

478 15 1
                                    

La verdad es un vaso de agua helada que te echan en la cabeza. La verdad es una bofetada rauda que puede doler más que cualquier otra. La verdad es cruda. Es cruel. La verdad se ausenta y llega cuando se le antoja, pero finalmente llega.

Primero cae como peso muerto en el estómago, dejándote pasmado. Congelado. Después te golpea furiosamente, logrando así que tus ojos ya no sean ojos, sino lagos. Posteriormente, va apresándote poco a poco, hasta el grado en el que esos lagos que tienes como ojos, se conviertan en glaciares. Conforme el tiempo pasa, esos glaciares van fortaleciéndose más y más, para después extenderse por el resto de tu cuerpo. Y mientras dura el proceso de congelación, mientras te encuentras a la espera de que tu corazón se detenga y acabes convirtiéndote en parte del hielo, es cuando te das cuenta que todo por lo que has tenido que pasar no es culpa de la verdad. Sino de la mentira.

La mentira. Esa que te estuvo cegando por tanto tiempo, la que te mantenía alejado de la verdad, su enemiga. Esa que te permitió vivir en tus fantasías, pero que no te previno de las consecuencias catastróficas que tendría más adelante seguir en esa situación.

¿Te das cuenta ahora de lo importante que es ser sincero con uno mismo? ¿De lo absurdo que es engañarse? ¿Y de que, de todas maneras, al final la verdad llegará, por más que intentes evadirla? ¿Por qué no tomarse a la verdad como debería de ser? ¿Por qué no aceptarla y aprender a vivir con ella, por qué no enfrentarla y hacer de ella algo mejor?
Por más cosas buenas que algo tenga, siempre habrá un punto débil. Estoy segura de que sabes que todos tenemos uno. Lo que quiero trasmitirte es que no podemos vivir entre mentiras, mucho menos propias. Tienes que aceptarlas con madurez y la frente en alto, sin importar lo que venga después. Porque si no aceptas tus verdades, tarde o temprano va a llegar alguien más que te las escupirá en la cara, y créeme que dolerá al doble.

Cuando logres aceptar tus verdades, la vida te cambiará por completo. Será entonces cuando la verdad deje de ser helada, dolorosa o cruel. Será sólo entonces cuando la verdad se convierta en algo glorioso, y la mentira se torne como la peor traición que podrías hacerte a ti mismo.

Consejos para un soñador © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora