Prohibido Llamarte Mío.

24. "Soy igual que todos."

Narra Cassie Hale:

Mientras me iba, me quedé pensando en si fui un poco dura con él, pero estaba demasiado dolida y decepcionada como para pensar con claridad.
No tenía ánimos de ir a clases, así que sin avisar a nadie salí de la escuela y me fui a la parada del bus.
De vez en cuando, inconscientemente, o quizá no, miraba hacia atrás con la esperanza, o quizá no, de que Trenton me busque, pero no lo hizo.

Y creo que se lo agradecía.

Subí al bus y me senté en el fondo de todo.
Puse mis auriculares y encendí el volúmen de mi iPad esperando a que la música sea más fuerte que mis pensamientos, pero no lo conseguí.

En serio me sentía muy estúpida. Yo sabía lo que pasaría, pero sin embargo me dejé llevar, dejé que me pasara lo mismo que la última vez.
¿Acaso me gustaba ser lastimada o qué?
Ya no sabía ni qué pensar. Creo que todo esto me enseñó que finalmente nunca terminas de conocer a las personas, que todas, quieran o no te lastiman, y que al final del día, sólo queda en cada uno de nosotros el dolor que nos hicieron los demás, o en este caso, yo misma.
Porque sé que soy la única causante de esto, porque permití que me gustara aún sabiendo que no terminaría bien. Porque los chicos como él son así, y las estúpidas como yo somos así.
Pero supongo que está bien, en unas semanas ya no lo veré más, y todo quedará como si nada hubiese pasado.

O eso esperaba.

Narra Trenton McCall:

Me quedé de pie observando cómo se alejaba hasta que se fue de mi vista.
Pensaba ir a buscarla, pero mis pies no podían moverse, pasó todo tan rápido que recién ahora mi cerebro razonaba y analizaba todo lo que había sucedido.
La chica, la primera chica que logró llegar más dentro mío que cualquiera ahora estaba corriendo de mí por usar a su mejor amiga.
En serio no podía ser peor.
Tenía muchos sentimientos dentro mío, quería ir a buscarla y hablar con ella, pero no escucharía, la conocía.
Pero lo que más me molestaba y no paraba de dar vueltas en mi interior era lo que me había dicho antes de irse.
¿En serio iría a Londres? ¿O lo decía para herirme? ¿Por qué no lo dijo antes? ¿Por qué dejó que yo diga todo lo que le dije?
Tenía que hablar con ella. No sé como ni cuando, pero debía hacerlo.

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Tenía clase de Literatura.

Mierda, lo había olvidado.

Me apresuré a entrar a la clases y cuando llegué me acobardé.
Cassie estaría ahí y no sé si estaba listo para verla.
Decidí dejar de pensar en eso y abrí la puerta.
Todos miraron en mi dirección y traté de esquivar todas las miradas.

-Señor McCall, un poco tarde, ¿No le parece?

-Sí, lo siento.- balbucee más para mí que para la profesora, lo cual no me importó porque no esperé respuesta alguna y me dirigí al asiento vacío al lado de Luke.
Me relajé un poco al darme cuenta que Cassie no estaba en la clase.

-Oye, Trent, ¿Estás bien? -Al instante en que Luke me preguntó aquello me pregunté por qué me había sentado al lado de él. No pararía hasta encontrar la verdad.

-Luego te cuento. -Sabía que debía contarle después de todo, no me dejaría en paz.

-Bien.- Respondió secamente y no volvimos a hablar hasta que terminó la hora.

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Recogí mis cosas y sin pensarlo me dirigí al estacionamiento de la escuela dónde tenía mi moto.

-¡Trent! -Me di la vuelta y Luke estaba trotando detrás mío tratando de alcanzarme.

-Escucha Luke, no tengo tiempo de hablar ahora mismo.- Le dije sin apenas mirarlo y poniéndome mi casco.

-No, no, espera, ¿No me dirás lo que pasó?

-Ahora no.

-Me dijiste que me dirías.- Dudó.

-Bueno, pues luego.

-Sabes que "luego" para tí es nunca.

-Bueno, pues entonces, ¿Nunca? - Le dije tratando de evadirlo.

-Vamos, Trent, no puedes sólo guardar todo lo que te sucede y luego descargarlo boxeando, las cosas no son así.

-Nunca fui bueno expresando sentimientos y miedos y lo sabes, no sé como harán las personas pero yo lo resuelvo de otra manera, así que ve a casa. - Estaba perdiendo la poca paciencia que tenía.

- No. - se colocó delante de mi moto.- Hasta que no me cuentes que sucede no te dejaré ir. Y lo sabes.

Di una larga exhalación y bajé mis hombros. Sabía que no se rendiría.

-Bien.- le contesté y me saqué el casco. - Arruiné todo con Cassie.

-¿Qué?- Abrió los ojos y luego los rodó antes de preguntarme: ¿Qué sucedió ahora Trent? Ya sabes que Cassie se molesta por todo, no te preoc...

-Se enteró lo que pasó con Allison. -Solté.

Se quedó en silencio unos momentos.

-Aguarda...Allison, ¿Su amiga? Con la que estuviste aquella vez...-

-Sí, sí, ella.- Lo volví a interrumpir.

-Oh, mierda, ¿Como se enteró? ¿No le dirías después? -Frunció el ceño.

-Sí sí, iba a decírselo pero no sé cómo lo supo.- Me agarré la cabeza tratando de pensar cómo lo supo.

-¿Y si se lo dijo Jasper? -Preguntó Luke. -Él te odia, y por ahí lo hizo para lastimarte, o le pasan cosas con Cassie...-

-No sé. Sabes, no quiero hablar de eso ahora. Hablamos luego.- Y con eso me coloqué el casco y me dirigí al gimnasio.

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Cuando llegué toqué un par de veces el gran portón de chapa pero nadie respondía, así que me fijé si estaba abierto, y milagrosamente, sí.

Me metí sin dudar, busqué los guantes y empecé descargar mi ira tratando de no pensar, pero se me hacía imposible.

Después de todo no sé si debía hablar con Cassie. Sería inútil. Todo lo que haría sería seguir hiriéndome con sus palabras y no estaba listo para enfrentarla.
Le había hecho daño y no lo merecía. Creo que lo mejor sería alejarme de una vez por todas, al fin y al cabo tenía razón.

Soy igual que todos.