Abre tus ojos

Aprendiendo A Vivir

   -sarah...- mire a mi alrededor, ya era tarde, el chico que le disparó en la cabeza a sarah había huido, alguien corrió detrás de él, la verdad ni siquiera esa es mi preocupación, mi mente por un momento se quedo en blanco, Sarah, Sarah, esto es mi culpa.

¿Que podía hacer? Todo se vino abajo, no había vuelta atrás, las manos me tiemblan ¿como paso? Apenas hace unos segundos eramos el par de gemelas y en cuestión de segundos todo a cambiado.
Salí corriendo de ese lugar, de pronto tengo tanta fuerza que no puedo parar de correr, siento que si paro me caeré y jamas lograré levantarme.
No hay nadie que me vea, ya puedo llorar.
-¡Mamá! - grite al entrar a casa, ella salio alterada de la cocina - mamá - dije llorando - sarah esta muerta.

Silencio, jamas había sentido un silencio tan abrumador, mamá no dijo nada solo miro a la puerta y vio a canela junto con otros 3 chicos cargando a la que hace 10 minutos era mi hermana ¿como llegaron tan rápido? No se, pero ahí estaba con una mancha roja en la cabeza y su cabello castaño oscuro cubriendo su cara, estaba fría y pálida. Sollozos de mamá se escucharon mientras abrazaba a su hija, era difícil ver eso, ver a sarah ahí era verme a mi misma muerta sobre todo cuando debería ser yo quien a cerrado los ojos.
Veo poco a poco como la familia es cada vez mas pequeña.

(hace 7 años)
Kelly la pequeña niña de 12 años estaba sentada en su sillón favorito mirando a la ventana sin nada mas que dinero en su mano para comprar uno de sus discos favoritos, aun es muy pequeña pero la musica que escucha la a obligado a crecer muy rápido, no es como las demás, ella no quiere juguetes ella quiere un disco, es lo único que la ayudará en este momento.
Han pasado 2 semanas desde que su papá murió se siente sola y no a pronunciado palabra alguna desde entonces , su mamá se preocupa mucho por ella, su otra hija sarah a estado orando para recuperarse pero kelly solo se esta dejando consumir por la situación.

Pasaron ya las horas, con ayuda de los hermanos en la congregación todo a quedado listo, compraron un ataúd, el primero que vieron, las flores son entregadas a los tíos y personas que se han ofrecido a ayudar, y yo, yo estoy en mi cuarto con las sábanas hasta la cabeza memorizando cada segundo, es tarde muy tarde, miedo me da de ver la hora, significa que es otra sin sarah, solo pensar en ello me cristaliza los ojos y me bloquea ¿que paso?, no comprendo nada ahora.
En ocasiones pienso que moriré de tristeza.
"El dolor debe hacerse sentir" siempre ha sido mi frase, solo que dejar que me vean en esta situación es realmente incomodo, estoy sola enserio que ahora sí estoy sola. ¿quien es ese Dios que dice amar a la gente? Y me quita todo, a mi padre y a mi hermana definitivamente estoy más que convencida que no, no hay Dios.

2,3 días sin pronunciar una sola palabra, no tengo apetito y siento un terrible vacío en el estómago es como si me hubieran golpeado, en ocasiones lloro dormida, cierro la puerta con seguro, no quiero ver a nadie, ni quiero a nadie, haré esto sola.
No es la primera vez que tengo que superar la muerte de alguien... Aunque a veces me pregunto si ya supere lo de mi padre.
Han venido a verme muchas personas pero no recibo a nadie, solo hasta que fue la voz de canela del otro lado de la puerta , noto que la habitación es mas grande de lo que recuerdo y me siento muy pequeña estando sola yo ahí adentro.
-Kelly, soy yo, canela - dijo casi en susurro.-entraré, por favor quita el seguro. - me levante de manera lenta a la puerta y recargue mi oído en ella-se que me oyes solo quiero darte un abrazo, no esta bien que pases tanto tiempo sola-continuo, tome la perilla y quite el seguro, de inmediato corrí de nuevo  a la cama y me cubrí hasta la cabeza con una cobija que usábamos Sarah y yo de pequeñas. Masoquista. Canela giro la perilla y entro a la habitación de manera lenta y silenciosa, se acercó y se sentó a mi lado, las lágrimas no podían evitar salir de mis ojos, es cuando hice un intento de no hacer ningún ruido que note que tenia mucha hambre.
-¿quieres comer algo? - pregunto. Negué. - tengo galletas - dijo, mi estomago hizo un sonido extraño en verdad tenia hambre, me descubrí la cara, tenia los ojos rojos, mi cabello era un nudo enorme, la piel clara hace que las ojeras debajo de los ojos sean mas notorias, tengo puesta una pijama la cual no e cambiado desde el domingo. Si soy un asco. Tome las galletas y probé una, estaban ricas.
-no quiero que hables pero ¿puedes decir algo? - Negué - bien-Se quedo un largo rato conmigo intentando animarme, al menos por 3 horas no llore.-¿quieres que me quede a dormir solo por hoy? - asentí . Tomó una manta y se acostó a mi lado fuera de ella no quiero a nadie mas con migo.