My Sweet Dream ~One Direction

Capítulo 19 ~ Cazador de ángeles.

*****narra Laura*****

Perfecto, otro día de mierda en mi mierda de vida, la vida en la que aquel chico que me gustaba, mi ídolo, se había liado con una rubia, y mientras, yo pensaba que lo había hecho para darme celos, pero ¡NO!, estaba teniendo una relación con ella…Y mientras yo, aquí, en mi habitación, encerrada sin apenas poder articular palabra, llevaba ya más de una semana llorando hasta quedarme dormida.

-Lau, cariño, tienes que comer algo.- dijo mi madre llamando a la puerta.

-No me apetece.- mi madre entró y se sentó a mi lado.

-Hija, no puedes seguir así.

-Mamá, no me apetece hablar.- le dije algo cortante, no me gustaba hablarle así, pero de verdad no quería hablar. Las horas pasaron, mi madre vino y me trajo algo de comer, apenas lo probé, lo único que quería era desaparecer, no podía ni ver la TV, en todas partes salía la noticia de la relación de Zayn con Emily, por poder, no podía ni ver las paredes de mi habitación, llenas de pósters de los chicos.

Mi móvil llevaba apagado practicamente una semana, nunca había estado tanto sin él, me apetecía entrar un poco en twitter para despejarme, así que me levanté de la cama, lo busqué y lo encendí. Tenía un montón de llamadas de Antía y de los demás, además de mensajes de textos que empecé a verlos poco a poco. Mi madre abrió la puerta antes de que viera más de dos mensajes de texto cuyo contenido era publicidad.

-Lau, voy a hacerla compra, ¿te parece bien? – entró - ¿Necesitas algo? –negué- No has comido nada. – me reprochó.

-Bueno, tráeme un croissant.- dije y se le dibujó una tierna sonrisa en su cara.

-En seguida.- dijo saliendo.- Si necesitas algo, llámame.- cerró la puerta y veinte segundos después escuché cerrarse la puerta de casa.

Seguí leyendo los mensajes, algunos eran publicidad y otros simples mensajes de llamadas perdidas y como siempre me había hecho ilusiones con algo que no iba a pasar. Levanté la persiana de mi habitación y entró un rayo de sol, mmmmmmm,cuánto hacía que no veía el sol. Abrí la ventana y entró la típica brisa de verano con olor a verano. Salí de mi habitación al baño, tenía una cara de muerta, decicidí darme una ducha ya que aún tenía maquillaje de la fiesta esparcido por mi cara debido a los llantos. Estaba lista para darme una ducha, pero me dio un antojo de bañarme, así que me fui al otro baño, no me daba un baño de espuma desde los 14 años, era hora de darme otro ya, así que llené la bañé, eché sales y me di un largo baño. Cuando salía mi móvil empezó a sonar, era un mensaje de un número desconocido: “Mira en la puerta de casa.” Me sujeté bien la toalla y miré por la mirilla, pero no había nadie. Abrí la puerta y en el felpudo había una caja blanca muy grande con otras dos más pequeñas encima. Las cogí, cerré la puerta y las llevé al interior de mi casa, ¿cómo había podido entrar en mi edificio y cómo había conseguido mi número este extraño?

Llegué a mi habitacióny las abrí, en una de las pequeñas había unos tacones blancos muy bonitos, en otra un bolso también blanco y por último, en la más grande había un vestido blanco, precioso con una nota, la cual decía: “Porque todos los ángeles visten de blanco preciosa, te espero en el parque de la paz que hay subiendo la calle de tu casa. Firmado: cazador de ángeles.” ¿Esto era para mí? ¿O es que seguía en mi cama soñando? Se me pasó la idea de que fuera Zayn por la cabeza, pero las notas estaban en castellano.

Me puse el vestido, los tacones y el bolso, metí lo indispensable dentro y salí en dirección al parque. Ahí había un montón de nilos, pero ninguno de ni edad. De repente se me aercó un niño de unos 10 años.

-Hola preciosa, ¿Qué haces aquí tú sola? – me dijo tal cual galán, por lo que no pude evitar reirme.

-Esperar a mi cita.- le respondí algo más seria.

-Entonces me esperas a mí.- dijo aún más galán. ¿En serio? ¿Este era mi cazador de ángeles? ¿Un niño de 10 años?

-Tú eres cazador de ángeles.- pregunté.

-Cazador de ángeles, fantasmas, brujas, yo soy lo que tú quieras hermosa.- dijo acercándose a mí.

-Bueno bonito, ¿y tú mamá? Creo que es hora de que te vayas con ella.- dije,estaba claro que este no era mi cazador.

-Está en casa, me deja venir solo al parque.

-Chaval, creo que esta es demasiado mujer para ti, mejor búscate una de tu edad.- dijo un chico alto y rubio, muy guapo por cierto. El niño se fue muy cortado.

-Hola, eres Laura, ¿verdad? –dijo el chico, asentí.- Soy Ramón.

-¿Cazador de ángeles? – dije, pude notar que estaba super roja.

-No.- dijo riéndose.- Pero trabajo para él, tengo que darte esto.-mellevé una pequeña desilusión, pero qué se le iba a hacer. Cogí el sobre que me estaba entregando Ramón, lo abrí y dentro había una nota que decía: “Veo que ya has visto a Ramón, sé que es muy guapo, pero créeme, yo soy mejor preciosa, como sé que te cansa andar, vete hasta la carretera que allí te espera tu carruaje princesa. Firmado: príncipe sin princesa.” No lo dudé y fui corriendo hasta la carretera, quería saber quién era mi príncipe cazador de ángeles, guardé la nota dentro del bolso y me dirigí a la carretera. Cuando llegué aluciné, ya que era un auténtico carruaje como el de las pelis, con dos preciosos caballos delante de él.

-Señorita.- dijo un señor que dirigía el carruaje.- Suba.- me estendió su mano, subí y se puso en marcha.

-¿A dónde vamos? – pregunté.

-A la playa.- me di cuenta de que estaba anocheciento.

-¿A estas horas?

-Cumplo ordenes señorita.- me dijo con una amplia sonrisa. Llegamos y bajé, el carruaje se fue a mis espaldas. En en letrero de la playa había otro sobre, lo cogí y lo abrí, decía: “Me alegro de que llegaras bien. Ahora tendrás que seguir mis indicaciones, vete siguiendo las flechas que encuentres, te llevarán hasta mí. Firmado: el tesoro que buscas.” Me hizo gracia su término. Seguí las flechas dibujadas en la arena, yo iba por el camino de madera que estaba al lado de la playa, ya que no quería manchar mi vestido, las flechas me llevaron hasta el puerto. Al llegar, no me lo podía creer, estaba sin palabras, el camino estaba lleno de pétalos de rosa y al final había una mesa preparada, pero eso no fue lo que más llamó mi atención, sino que mi príncipe cazador de ángeles estaba allí, sujetando una rosa.

-Hola pequeña.-dijo estirando su mano para entregarme la flor, casi se me para el corazón, que esas palabras salieran de su boca me mató, el “pequeña” sonó como eco en mi cabeza.

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Chicas, Antía's back!!! Siento mucho la espera, pero aquí os dejo con dos capítulos llenos de ternura, intriga, amor...

Espero que os gusten y como dijo laura la vez pasada gracias a todas, sois la razón por la que ella sigue escribiendo y yo dejando que leais su maravillosa novela.

Y laura, mi niña, mi amor, mi todo, no es nada de veras, gracias a ti por dejarme conocer tus historias antes que a nadie, ya sabes que para lo que necesites yo siempre estaré aquí. <3

MUCHAS GRACIAS A TODAS VOSOTRAS, SOIS GENIALES, GRACIAS POR SUS COMENTARIOS Y VOTOS, BESOOOOOOOOS.