NO SOY TU FAN [Rubius y tu]

Capítulo XV

“¡Como me encanta mucho estar secuestrada! ¡Vuelvo ya que compre unas pizzas para comer juntos en el calabozo!”

___ POV

En la tarde cuando el tipo (que por cierto no se ha quitado el pañuelo de la boca ni su gorro) estaba dormido encendí mi paquete de datos y le mandé mi ubicación a Rubius. El pendejo no lo revisó y antes de que él se despertara apague rápido la pantalla. Cuando oscureció me obligó a dormir en la misma cama con él, no me negué para que no se enojara.

Ya es de día y el tipo aún no se despierta, me levanté para ir a la puerta lentamente evitando hacer ruido. La llave esta pegada en la puerta así que le di vuelta abriéndola y salí corriendo como nunca en mi vida. Que bueno que no me quite los zapatos antes.

—¡Ah! —grité para mí.

—¡Vuelve estúpida niña!

—¡No quiero!

Mierda, él me está alcanzando, estúpidas piernas cortas.

Rubius POV

Jueves 02 de febrero, 07:36 am

Ya estamos listos, todas las cosas necesarias están en el coche y cada uno tiene su palo de madera para defenderse.

—Listo —dije—, suban y Cheeto tu conduces.

—Pero ¿Por qué yo? —protestó.

—Tío que yo no sé manejar.

—Dile a Willy que seguro lo hará encantado.

—No me fio de él, tengo miedo de que choquemos por que no vio el carro —comenté.

—Vale —subió al coche—, vamos por la chica que necesita nuestra ayuda.

Cuando todos nos subimos, Cheeto prendió el coche, prendí mis datos y me llego un mensaje de ___. 

Me cago en todo ya, si hubiera tenido el wifi prendido ya estaría con nosotros.

—Daté la vuelta —ordené.

—¿Para qué?

—La tienen del otro lado a unos quinientos metros —dije leyendo el móvil.

—¿Y a donde pensábamos ir hace un momento? —preguntó Alex.

—No lo sé.

Demasiado concentrados como para preocuparnos en siquiera saber dónde la tenían, juro que en mi puta vida seré un policía, soy un asco.

Cinco minutos han pasado y ya casi llegamos al destino.

—Bájale a la música —dijo Frank.

Le bajaron y a lo lejos se pudo escuchar unos gritos.

—¡No quiero!

—¡Maldita sea, vuelve!

—¡Como me encanta mucho estar secuestrada! ¡Vuelvo ya que compre unas pizzas para comer juntos en el calabozo!

Ella y un tío están corriendo, pasaron a lado del coche y siguieron derecho.

—___ —susurré.

—¿Quién?

—Me cago en su puta desgracia —espeté bajándome del coche y corriendo detrás de ellos.

No tardaron en seguirme detrás, parecemos medievales con los palos y gracias a mi altura pude alcanzarlo. Le pegue en el hombro a lo que volteo y es el mismo que la drogo hace apenas dos días, hay que ser un hijo de puta para hacer eso. 

___ POV

—¿Qué coño quieres hacer con ella?

Esa voz, ¿Rubius? Me gire y tengo que admitir que me siento dentro de un fanfic, mucha casualidad. Él lo tiene agarrado del hombro para que no se escape y es mi oportunidad.

Camine para quedar frente al extraño —Tú pendejo, no sé qué intentabas hacer, pero pronto lo sabremos porque la policía ya viene —le di una patada en sus bajos—, te mereces eso y mucho más.

Cayo de rodillas al suelo y su cara de estrelló igual, ni hablar puede. Qué bueno, eso le pasa por ser un idiota degenerado.

—___ —dijo Alex asombrado al verme.

Los mire y bueno, esto ya es demasiado, todo el crew completo está aquí frente a mí.

—No pinches mames wey, esto ya es casualidad del demonio, casualmente desde que me mude aquí me los encuentro siempre a ustedes. Esta chingon, pero ya me estoy asustando —exclamé rápido y con mi respiración agitada los observo.

Mierda, se me salió lo mexicana. Tanto tiempo evitando hablar de esa manera y al final me vuelco yo sola. No me apeno de mi país, pero no quería estar todo el rato diciendo palabras que nadie iba a entender.

Mi respiración no se está acomodando y estoy sintiendo los escalofríos ¿Por qué ahora?

—Discúlpenme —me aleje a unos veinte metros dándoles la espalda.

La opresión del pecho está aumentando, también estoy comenzando a temblar y eso es nuevo.

De acuerdo, puedo ver un árbol, un niño, una roca, un perro y el pasto. Puedo tocar el árbol, el pasto, las hojas y mi cabello. Puedo escuchar los niños jugar, el perro ladrar y la sirena de una patrulla. Puedo oler el pasto recién cortado y la tierra mojada. Puedo saborear el algodón de azúcar que tienen allá. 

Esta funcionando, ese ejercicio si funciono, que alivio. Me siento mejor, pero me esta dando mucha hambre, creo que tengo que comer ya o me desmayare. Estoy apoyada en un árbol y escucho pisadas, muchas pisadas aproximándose.

—¿Estas bien? —preguntó Luzu.

—Si no me gustaran ya les estaría diciendo entrometidos, metiches que se meten en cosas que no les incumbe —comenté aun dándoles la espalda.

Me giré dándoles una sonrisa —Pero como si me gustan, tengo que agradecerles, aunque este idiota tardo doce horas en leer mi mensaje —señale al más alto—, ignorando eso, si no les molesta tengo que ir a comer.

—¡Sí vamos! nosotros invitamos —dijo Frank pasando un brazo por mi hombro.

—Sí, vamos —agregó Rubius caminando hasta tras.

Después proceso todo esto, sólo quiero comer con estos pendejos. Es de cariño obvio.

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Aquí esta él capitulo (ni que fuera un hombre llamado capítulo xd)

Pd: No saben lo feliz que me hacen sus comentarios, no me cansare de repetirlo :) <3

31/01/18: Sí, me reí demasiado, están bien estúpidos todos XD