36.- Perfect

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Bryan empieza a caminar hasta quedar de frente a mi pero de la otra esquina de la habitación, las personas al verlo se hacen a un lado para dejarlo pasar.

El pasa como un rey entre pueblerinos, todos nos miran y quiero caminar hasta llegar junto a el mas no puedo moverme, es como si mis pies estuvieran pegados a él piso, cada paso que el da acercándose a mi es como si me estrujaran el estomago.

Cuando al fin puedo sentir mis piernas empiezo a dar algunos pasos hasta que los dos llegamos a estar frente a frente, Bryan sonríe haciendo que yo haga lo mismo más ninguno hace algo ¿Que debo hacer? ¿Abrazarlo o besarle?

- Hola.

Sonrío - Hola - le tiendo la caja - para ti.

Voltea hacia el regalo - ¿Que es?- regresa la mirada hacia mi.

- Cuando sea hora de abrirlo lo veras - río.

Deja el regalo sobre la mesa que esta al lado y me tiende una mano - ¿A la señorita le gustaría bailar conmigo una pieza?

Volteo hacia los lados, nadie esta bailando, algunos hablan entre ellos y otros nos lanzan miradas de curiosidad,  no los culpó ya que están acostumbrados a ver las mismas caras en cada fiesta, ahora yo soy la nueva aquí.

- Pero no hay nadie bailando - susurro aun viendo alrededor.

- ¿Y eso que importa? ¿Es mi cumpleaños no? - imita mi tono de voz.

Volteo hacia el con una ceja alzada.

- Okay.

Agarro la mano de Bryan y el me lleva a él centro de la sala donde han quitado los sillones y en vez de eso queda una "pista de baile". Al principio los dos quedamos frente a frente, Bryan pone una mano en mi cintura mientras que yo la pongo en su hombro, su otra mano la entrelaza con la mía, comenzamos a dar pequeños pasos al ritmo de la música clásica que suena de fondo.

Volteo a ver el lugar que con la luz de los candelabros hace que la sala se vea aun mas blanca y esto hace que todas las chicas y señoras resalten mas por sus vestidos de colores, cada mujer en esta sala lleva un vestido de cóctel pegado a sus grandiosas figuras y ni hablar de los señores que con sus trajes negros y relojes caros emanan poder y avaricia.

¿Porque me siento mas como una presa y no como una invitada? Es como un ratón y un león, la sala esta llena de leones y yo soy el ratón.

- ¿Te pasa algo? - volteo hacia Bryan.

- ¿Porque lo dices?

Me da una vuelta - Pues porque tienes la misma cara de cuando no estas cómoda en alguna situación o lugar.

Que bien me conoce.

- Es solo que...no lo se, siento la mirada de todos en nosotros y eso me hace pensar en si me vine vestida adecuadamente o si mi maquillaje no es muy exagerado o si los zapatos combinan con este vestido...

- Hey Hey tranquila - me interrumpe - lo que ellos piensen que te valga mierda, algo que debes saber de estas personas es que jamas los podrás complacer, siempre quieren mas y mas y por esa misma razón lo que hoy piensen o crean de ti te debe valer diez kilos de mierda porque esta noche estas perfecta, cuando Eric me dijo que viera hacia la puerta yo no entendía el porque hasta que te vi - sus ojos se conectan con los míos - No te reconocí, me sorprendí mucho porque jamas había visto una chica mas hermosa como tu.

- Lo se, vi cuando la copa se te cayó al suelo - ríe bajo cuando digo eso - gracias a eso más gente volteó a verme - hago una mueca.

- Bueno pues es mejor así.

Bad Boy Good Lips💋Where stories live. Discover now