13.- VERDADES

3 1 0
                                    

-No sé qué esperas que diga.

-Me estás escondiendo algo, no saldrás de aquí hasta que me digas lo que quiero escuchar.

Estaba bloqueando la puerta, con los brazos cruzados, era tan autoritaria, incluso más que yo.

-Sé que es algo importante, de lo contrario no se te haría difícil de decir.

-¡Esta bien! Fue durante el beso con Ethan, sólo ha pasado tres veces, que yo sepa.

-¿Qué tiene de especial esa vez?

-Fue la única vez que los vi brillar con tanta fuerza, era como si tuvieran vida propia, no sabría describirlo, la manera en que me sentí, era increíble, pero me asustaba al mismo tiempo.

-Creo que lo entiendo.

-¿Cómo? Apenas y yo entiendo lo que te digo.

-Sólo lo entiendo. Hasta dónde sé, no representan un peligro para nadie, has vivido así algún tiempo, desde que te conozco te sucede esto. Quién sabe si te ha pasado antes.

-Hay alguien que lo sabe, pero no será fácil que me lo diga.

-¿Quién?

-Mi madre.

-Buena suerte. ¿Cómo harás para que te diga? Ella se controla bastante bien.

-No entiendo de qué hablas. Espera. ¿A mi madre también le pasa?

-¿A qué crees que me refería cuando dije que se parecen bastante?

-¿Cuándo?

-Sólo la he visto una vez. Estaba preocupada por ti, recuerdas, cuando nos conocimos, la primera vez que celebramos tu cumpleaños, tu madre te dejó hacer una fiesta de pijamas, estábamos tu y yo, y de pronto te desmayaste, estuviste inconsciente por mucho rato, tu madre no quiso llevarte al doctor, estaba desesperada, creo que es la única vez que te he visto enferma. Como sea, mientras estabas inconsciente tu madre no se controlaba, vi sus ojos cambiar, no estoy segura que ella sepa que yo sé.

-Nunca me enfermo, es verdad, pero ¿Por qué nunca me habías dicho antes todo esto? Eso fue hace algunos años, tuviste muchas oportunidades para mencionar algo.

-No quería hacerte sentir incómoda ya lo dije. Sobre todo, que es algo de ti que me agrada.

-No sé si esa parte de mí, me agrade.

-Ahora sí, eres libre.

Abrió la puerta, fue cuando recordé que ella no había respondido a mi pregunta, cerré la puerta y opté la misma postura que ella había tomado.

-No, no, no, es tu turno de responder señorita.

-Tenías que acordarte de eso.

-Es una pregunta simple.

-La respuesta no lo es.

-Sólo dime lo que sientes.

-No lo sé, no sé exactamente lo que siento, es un buen chico, lo sabemos, es guapo, pero, no sé si quiero convertirme en esa chica.

-¿Qué chica?

-La clase de chica que soy cuando estoy con él.

-Sigo sin entender.

-Sólo, déjalo así.

-Sabes que no lo haré, necesito saber.

-¿Cuál es tú intensidad con el tema?

-Sé que te gusta James, no entiendo por qué negarlo, y sobre todo qué haces con Patrick.

Salió de mi boca antes que pudiera contenerme, en algún momento tenía que suceder, Nathasha estaba en negación y yo no podía hacer de cuenta que no lo veía.

KenzieWhere stories live. Discover now