Capitulo 32 MODIFICANDO

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     Abro los ojos y me encuentro en una habitación de paredes y decoración en blanco y negro. Una intravenosa pinchada en el dorso de la mano y en el sofá de cuero negro yace un cansando Jackson que...

     ¿¡QUE!?

        -¿!Haynes!?-grito.

    Jackson abre los ojos de golpe y me mira. Sus ojos grises brillan como la estrella más radiante que ilumina la oscura noche.

    Se me seca la boca. Está soberbio, pero me mira con mala cara. ¿Por qué?

        -No vuelvas a salir al bosque sola-me suelta en cuanto se levanta.

            Maldita sea.

-Está bien. Lo siento- ¿Por qué me estoy disculpando?

       -Mmm, eh ¿Qué haces aquí? Casi nunca estas en la habitación-pregunto con timidez al atreverme hacer un comentario referente a un lugar que es su propiedad.

        Bosteza

      -Estaba durmiendo.

      -¿Por qué?-pregunto confundida.

   -Porque el cuerpo humano...

   -No ¿Por qué aquí?- Ruedo los ojos.

         Me mira ceñudo

  -me pediste que me quedara.

     Pensé que me odiaba. De todos los hombres más complicados que he conocido en toda mi vida, él se lleva el premio Oscar por mayoría. Un día me desprecia y al otro es cariñoso. Estoy muy segura de que pudo haberse marchado...tal vez Jack si tiene alma...después de todo.

          -¿eres bipolar?

    Recordándome a una persona que la bipolaridad lo delata a kilómetros como a una chica en sus días, de inmediato:

           ¿Dónde está Liam? ¡Por Dios...! ¿Dónde está Liam?

     El miedo creciente y helado que atenaza mi corazón se convierte en terror, y se me erizan todos y cada uno de los folículos del cuero cabelludo. ¿Y si la vampira le ha hecho daño? Mi respiración empieza a acelerarse y la adrenalina y un pánico paralizante invaden todo mi cuerpo.

       -¿Dónde está mi hermano? ¿Dónde está Liam?

       -Tu hermano...

Quito de un jalón la aguja en mi dorso. Dolió como el infierno en el momento, pero luego se siente un hormigueo. Salgo de un brinco de la cama, corriendo planta baja en busca de mi hermano.

Me siento aliviada al ver a Liam, caminando nerviosamente arriba y abajo por la cocina ¡Oh gracias a dios! Estas bien ¿está bien? ¿Pero cómo? No tiene las heridas ¿Qué ocurre? Aun lleva la ramera con sangre y jeans. Su semblante se ve más pálido de lo normal y sus ojos castaños han cambiado de tono pero se ven alegres, llenos de brillo.

     Siento que he tardado un millón de años en procesar todo esto, cuando en realidad ha transcurrido apenas una fracción de segundos.

   Pese a tener la boca absolutamente seca, intento hablar.

         -Liam-alcanzo a decir

        El sonríe.

         ¡Oh, gracias a Dios que está bien! prácticamente me abalanzo sobre él, rodeándole el cuello con los brazos. , y trato de que mi desesperación no me asfixie. Sollozo pegada a su pecho y, en cuanto empiezo, ya no puedo parar de llorar, las lágrimas liberando toda la dolor y preocupación de este último episodio. Liam me abraza más fuerte.

Mas halla del Bosque: oculto en las sombrasWhere stories live. Discover now