Una carta

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Me encuentro sentada sola en mi habitación. Luke y mi hija se encuentran junto a mis padres en un parque infantil cerca de casa. Yo me quedé ya que tenía algo que hacer. Esa es la razón por la que me encuentro mirando la pantalla de mi celular. Recordaba haber intercambiando números telefónicos con Juliet aquel día en la cena, pero no estaba completamente segura. Es por eso que luego de dos días de indecisión y dudas con respecto a si hacerlo o no, decidí buscarlo entre mis contactos para ponerme en contacto con ella. Necesito hablarle para así poder conseguir el número de Alexander y poder hablar con él y de una vez por todas contarle toda la verdad.

Para ser honesta, el simple hecho de pensar en contarle a Alex sobre Mia me aterroriza. No sé como se lo va a tomar, ni sé cual va a ser su reacción. Tengo mucho miedo de que responda de una manera negativa. Es decir, sé que el enterarse que es padre de una niña de cuatro años va a ser algo bastante fuerte y chocante, pero espero que no se ponga agresivo o a la defensiva. Si ahora no nos llevamos bien, esto podría causar que me odie, y no creo que pueda vivir con eso. Y lo que mas me asusta de todo: Que rechace a Mia y termine lastimándola.

Pero por otro lado, que pasaría si su reacción es totalmente la contraria? Quiero decir, que pasa si en realidad se alegra de todo esto? Si saber que tiene una hija no lo entristece, sino más bien lo vuelve increíblemente feliz?  Sería algo increíble. Siempre quise que mi hija conociera a su padre y que este la amara con todo su corazón, así que pensar que eso podría llegar a pasar me pone nerviosa y me hace sentir ansiedad. 

No sé que va a pasar, todo está en manos del destino, solo queda esperar que todo salga bien. Es hora de enfrentar este momento que estuve posponiendo y evitando durante tanto tiempo, y sin importar el resultado, sentirme liberada y seguir adelante.

Finalmente encuentro el número. Lo observo por unos cuantos segundos y luego presiono la tecla ''llamar''. Suenan tres tonos y nadie contesta. Estoy por colgar, cuando se escucha como contestan y una voz se hace presente.

-Hola?- se escucha la voz de la rubia a través del teléfono.

-Hola, Juliet?- pregunto para cerciorarme que este es su número, además de que me pongo nerviosa de repente.

-Si, ella habla. -contesta.- Quién es?

-Soy Kendall, la amiga de Alex- respondo y muerdo mi labio inferior, esperando su reacción.

-Kendall, hola!- habla con un tono alegre.- Cómo estás? No me esperaba tu llamada.

-Estoy bien, todo bien- digo, y decido buscarle un poco de conversación para luego preguntarle por el número de Alex sin ser muy obvia.- Te llamaba para preguntarte cómo estabas tú. Ya sabes, debes estar estresada con todo este tema de la boda no?

En serio eso es lo único que se me ocurrió preguntar?

-La verdad es que si- contesta y suelta un suspiro de agotamiento. - De hecho, Alex y yo acabamos de volver de una empresa de catering para elegir la comida que vamos a servir ese día. Jamás pensé que organizar una boda iba a ser tan difícil.

-Si, debe serlo- finjo una risa. Aunque me cueste admitirlo, escucharla hablar sobre su casamiento con Alex es bastante difícil.- No tienes a nadie más que te ayude?

-Si, mi mejor amiga y mi madre me ayudan lo más que pueden, pero ellas no viven acá, por lo que es complicas- se calla un momento como si estuviera pensando.- Se me acaba de ocurrir una gran idea: No quieres ser una de mis damas de honor?

Casi me atraganto con mi propia saliva al escucharla decir eso. Escuché bien? Lo habrá dicho en serio o me lo imaginé? Debe ser una broma cruel del destino.

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