Caminos Cruzados

Una y otra vez

Con ayuda de Luke preparo el almuerzo esperando con ansias a que Mia y Alex lleguen.

Han pasado menos de veinticuatro horas desde la última vez que estuve con mi hija y ya la extraño demasiado. Me pregunto cómo la habrá pasado. Si para mi la separación es difícil, me imagino que para ella también lo fue a pesar de que solamente fue una noche. Es la primera vez en toda su vida que duerme alejada con mi, pero lo que hace especial la ocasión es que lo hace junto a su padre biológico. Aún no puedo asimilar que sean parte de la vida del otro.

Y para añadirle un detalle más a la novela que es mi vida, ahora me entero que Alex y su prometida están esperando un hijo; el que se va a convertir en medio hermano o hermana de mi pequeña. No es algo loco como el destino nunca resulta ser como uno se lo imaginaba? Por suerte Alex y yo decidimos esperar a que pase un poco más de tiempo y el embarazo avance para contarle a Mia al respecto. No queremos causarle ninguna ilusión en caso (Dios quiera que no) de que algo llegara a pasar. Además, aún no hemos hablado siquiera el cómo lo haríamos asi que no es momento todavía.

En el almuerzo de hoy no solamente estaremos nosotros cuatro, sino que se nos unirá Juliet. 

Esta mañana se me ocurrió la idea de invitarla a ella también, para conocerla un poco mejor ya que formara gran parte de nuestras vidas de ahora en adelante una vez que la boda se lleve a cabo; pero además para felicitarla por el embarazo y para aprovechar también de contarle la noticia a Luke.

Anoche no tuve la oportunidad de hacerlo debido a que él y yo estuvimos algo... ocupados debido a la ausencia de mis padres en la casa ya que se fueron a una conferencia de trabajo por un par de días y obviamente la ausencia de Mia también. Esta mañana también traté de contarle pero no pude encontrar la ocasión perfecta. No es como que tenga miedo a que se enoje conmigo, pero la verdad es que no creo que le agrade mucho la idea. No se lleva tan bien con Alex, y el hecho de que va a ser padre de lo que vendrá a ser un medio hermano para Mia puede ser un motivo para  que le agrade menos. A veces pienso que de cierta forma puede estar celoso de él, ya que a pesar de que Luke ama a Mia con todo su corazón no es el padre biológico; y nada de lo que haga puede cambiar ese hecho. Aunque estoy más que segura que mi hija lo ve como un padre de todas maneras y le he recalcado y agradecido muchas veces lo que ha hecho tanto por ella como por mi, temo que en el fondo se sienta así.

Cuando la comida ya casi está lista, le pido a Luke que ponga la mesa ya que no falta mucho para que lleguen. Observo el reloj y para ser honesta comienzo a sentirme un poco nerviosa.

 No he visto a Alex desde ayer que tuvimos nuestro pequeño''momento'' en el sofá cuando estuvo a punto de besarme. La verdad es que a veces tiendo a imaginarme las cosas y a ver algo donde no lo hay en realidad, pero estoy casi cien por ciento segura de que esto en verdad sucedió. Por eso es que quiero esperar a ver cómo se comporta Alex el día de hoy y si hay alguna vibra rara entre nosotros. Sinceramente espero que no, porque no quisiera tener que llegar a preguntarle el porqué casi sucede lo que sucede ni tampoco que nuestra relación se tornara incómoda de ninguna manera. Además, estoy a punto de casarme con un hombre al que verdaderamente amo, por lo que no hay manera en que pudiera tener sentimientos por alguien más en este momento; mucho menos por mi ex que igualmente va a casarse y a convertirse en papá por segunda vez.

El sonido del timbre irrumpe en la sala anunciando la llegada de nuestros invitados, e inevitablemente una sonrisa se hace presente en mi rostro al saber que mi pequeña está de vuelta. Lamentablemente justo me encuentro en el proceso de llevar las fuentes calientes de comida a la mesa, por lo que el encargado de abrir la puerta es Luke.

Escucho la puerta abrirse y las voces de las tres personas entrelazadas entre si mientras se saludan mutuamente. Ni bien termino con lo que estaba haciendo, avanzo un poco hacia la puerta de entrada y me agacho al ver que Mia viene corriendo hacia mi con brazos abiertos.