N O T I C I A S.

9.3K 607 78
                                    

Unos días después del GPF, anuncié mi retirada al igual que Victor. Ambos decidimos que tomariamos un descanso en Hasetsu.
Cuando llegamos a casa, fuimos recibidos con mucha alegría y felicitaciones. Papá y mamá nos dejaron quedarnos el tiempo que quisiéramos en casa, con la condición de que los ayudáramos.

Después de varias semanas, en el Ice Castle, Victor decidió dar clases de patinaje a los más jóvenes, con el permiso de Yu-chan. Por supuesto que todos querían entrar, es decir, ¿cada cuánto uno puede ser entrenado por la leyenda viviente del patinaje artístico sobre hielo?

Todo parecía mejorar, tanto en lo económico como en el romance, y sobre todo en eso.
Victor y yo teníamos una relación de pareja común. Todas las noches nos desvelábamos hablando de nuestro día, otras, estando sintiendo la cercanía del otro. Esto es como un sueño, ojalá nunca se termine.

(...)

Era domingo, ese día no quería levantarme de la cama. Mi cuerpo pesaba y el sueño no se esfumaba. Victor se había levantado minutos antes para traerme el desayuno a la cama. Esto no debe ser así, no debo de ser una molestia para Victor.
Con dificultad, intenté ponerme en pie. El espejo que estaba frente a mi me reflejó, notando las grandes ojeras que estaban debajo de mis ojos y mi cabello desordenado. Vaya que soy un desastre.

Me dirigí al baño, para siquiera pasarme el agua por la cara. Pero al dar un paso, un mareo me vino al instante, haciendo que perdiera el equilibrio y cayera al suelo.

En ese momento, Victor entró con una bandeja con comida. Al verme en el suelo, corrió a ayudarme, cosa que agradecí, no podía hacerlo por mi mismo.

—Yuri, ¿qué pasó? —Victor me había sentado en la cama mientras me sujetaba de la mano suavemente. Su calidez realmente me reconforta.

—N-no lo sé, estaba a punto de ir al baño cuando tuve un gran mareo, haciendo que cayera —no podía explicarlo, era algo extraño en mi.

—Tal vez es debilidad, tienes que ir al doctor —Victor tenía razón, puede que no he estado comiendo bien y por eso la debilidad y los mareos.

—Vayamos hoy, sea lo que sea, quiero saberlo —Victor asintió.

Esperamos un rato más, para que el mareo se pasara por completo. Y ya, minutos eternos así, por fin quise probar bocado.

—Victor, ¿quién desayuna katsudon? —reí al ver el gran plato en la bandeja.

—De vez en cuando es bueno comerlo —Victor acercó el plato. Cuando lo tuve frente a mi, al verlo, el olor, todo me causó un gran asco.

Salí corriendo al baño para vomitar. Ahora si estoy preocupado, ¿qué me está pasando?

No esperamos ni un minuto más, salimos directo al hospital. Donde me hicieron un chequeo, ultrasonido y no sé qué más estudios. Cuando nos pasaron con el doctor, éste estaba leyendo los resultados. Nos pidió que nos sentamos mientras el leía otros papeles.

—Señor Katsuki —dijo al fin el doctor—. ¿Hace cuánto que siente esos mareos y náuseas?

—¿Eh? Esto... Los mareos han sido débiles, fue hace un par de días y las náuseas apenas hoy —contesté lo más que recordaba.

—Yuri, ¿por qué no me lo habías dicho? —preguntó Victor asustado y molesto.

—Lo siento, no quería causar problemas —y era verdad, Victor estaba muy ocupado con el patinaje.

—Escuchenme con atención, esto es algo importante y delicado —el doctor se quitó los lentes y nos miró a ambos—. Señor Katsuki, usted está... embarazado.

¡Ah...! Embarazado, eso era. Ahora lo entiendo todo...

—¡¿Qué?! —gritamos al unísono Víctor y yo.

—Tranquilos —no comprendo nada.

—¿Eso es posible? Doctor, soy un hombre —dije asustado. Si es un sueño quiero despertar ya.

—Hay como cinco casos en todo el mundo, así que pensé "podría ser una confusión", pero viendo el ultrasonido lo confirmé. Lleva aproximadamente tres semanas —el doctor sacó una hoja, haciendo anotaciones.

Esto... ¿es un sueño, verdad?

Hanarezuni soba ni ite / Sólo quedate a mi lado (Yuri On Ice)Where stories live. Discover now