Maldito Andrés °Sin Corregir°

Progreso.

Han pasado dos semanas más, Andrés a mostrando progreso y los doctores dan mas esperanzas de vida.

Decidí ir a visitarlo,su progreso permite que podamos entrar a su habitación.

Pero tenemos que usar bata,tapaboca, guantes y algunas cosas mas.

Me sentía feliz por que entraría para estar a su lado.

Tenia los nervios a flor de piel,me sentía emocionada, extraña,me sentía de miles de maneras diferentes.

Me llevaron a un pequeño cuarto,me hicieron lavar las manos y ponerme algunas cosas.

Me posicioné frente a la puerta, el doctor me dio algunas indicaciones y después la abrió.

El olor a medicamentos inundó mis fosas nasales, pero se esparció de inmediato.

Me acerque lentamente a él, podía escuchar mi propio corazón hacer estruendo al latir desenfrenadamente.

Me pare a su lado y tome su mano fría entre la mía,la maquina conectada a su cuerpo sonaba una y otra vez.

Mis ojos picaban pero no iba a llorar,debía ser fuerte.

***-***-***-***

Pase alrededor de dos horas,contándole todo lo que había pasado durante estos cuatro meses que a estado en coma.

Yo sentía que él me podía escuchar,por más absurdo que suene.

-Señorita Manuela, su tiempo de visita a acabado, el padre de Andrés lo quiere ver y no pueden estar dos personas al mismo tiempo- dijo una enfermera muy bajita y agraciada.

Asentí y bese la grande mano de Andrés, cuando me iba a ir,sentí como con su pulgar acarició mi mano.

Incrédula me gire,mire de nuevo nuestras manos,pero el seguía moviendo su pulgar lentamente.

-¡Se esta moviendo!- exclamé con notable alegría.

La oí gritar “doctor” y desaparecer por la puerta.

Segundos después entro ella acompañada con el doctor especialista que sus padres le asignaron a Andrés.

-Señorita,salga por favor- me ordenó el doctor.

Me separe de Andrés y salí de la habitación, afuera se encontraba sus padres y en cuanto me vieron se acercaron a mí.

-¿Que pasa con Andrés?- preguntaron los dos al unisonó con expresión desesperada.

Cuando estaba apunto de hablar, el doctor apareció.

-Andrés esta despertando,esta respondiendo a estímulos- dijo el doctor con aires de alegría.

Las lágrimas salieron de mis ojos,tanto como los de sus padres y sin pensarlo nos abrazamos los tres.

Llorábamos, pero de alegría.