Prólogo

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Narra Kara:

   Otro día en CATCO, el sonido de los teclados por toda la oficina de gente creando los mejores artículos de National City. Algo que posiblemente yo nunca lograré. Miré la pantalla de mi laptop y no se me venía ni una idea. Tenía que hablar sobre un robo que hubo hace unas horas. Debería ser fácil para mí porque yo salvé a las personas de ese robo, pero hoy me sentía apagada.

   Pero lo peor de todo son los mismos gritos de mi jefe: Snapper Carr.

  —¡Kara! ¿Terminaste el articulo?

  —Estoy en eso jefe—respondi sin ganas.

  —¡Termina rapido! 

   Cuando él se fue, yo suspiré. Me quedé mirando el teclado, esperando que la inspiración llegue a mi cabeza. No esperaba que me den un testimonio de todo lo ocurrido, pero al menos un título o una palabra clave para comenzar. Pero de pronto, escuché en las noticias algo interesante.

  —En últimas noticias. Un incendio a provocado el miedo de la gente en National City. Los bomberos están tratando de apagar el fuego, pero no hay resultados. Esperemos que Supergirl este viendo esto.

   No dudé en correr hasta el ascensor y presionar el botón hacia el ultimo piso. Corrí hasta la azotea mientras me sacaba mi blusa y mi capa ondeaba con el viento. Volé hasta encontrar una gran capa de humo negro y aterricé al lado del edificio.

   —¡Supergirl! Hay una persona en la ultima planta. No podemos llegar hasta ahí, todo está destruido—dijo un bombero.

   —No se preocupe, han hecho un buen trabajo— dije para calmar a los bomberos. Volé hasta la ultima planta y, como había dicho el bombero, todo estaba destruido. Ya no había ni suelo. Me elevé un poco y comencé a buscar a la persona que faltaba, hasta que escuché que una niña lloraba. Me acerqué a la cuarto de donde venia el sonido y con una patada derrumbé la puerta. Entré y me acerqué a un ropero que estaba en la esquina, al costado de una ventana. La abrí y adentro estaba una niña llorando. La cargué y la cubrí con mi capa para que no se haga daño con las llamas de fuego. Aproveché la ventana y con mi mano rompí el vidrio. Todo el humo comenzó a salir desesperadamente.

   Dejé a la niña con sus padres y apagué el fuego con mi aliento congelado. Me sentí bien por un momento, pero al final, siempre era lo mismo: Volar hasta la zona del accidente, salvar a la gente, escuchar los aplausos de policías y bomberos, ver a reporteros tratando de buscar un buen lugar para tomarme fotos y escuchar siempre la misma frase de cada persona que salvo.

   —Supergirl, gracias por salvar a mi hija— dijo una mujer, yo voltee tratando de hacer la sonrisa más creible que podía crear.

   — No hay problema. Es mi deber—dije.

   Volé hasta mi departamento, me puse algo de ropa y aproveché para escribir mi articulo con mi velocidad, además de ver un poco la televisión y comer helado. Regresé a CATCO y esperé a que venga mi jefe.

   —¡Kara! Que haces, te dije que termines...

   —¿Los artículos?— le interrumpí—. Aquí están—le dije dándoselos—. Además hice un articulo sobre el incendio que acaba de haber

   Snapper le dio una ojeada a los artículos, se acercó a la pizarra y me puso un punto más en mi nombre. Yo saqué una pequeña sonrisa de mi rostro.

   —Muy bien Danvers. Ahora, necesito que le hagas una entrevista a Lena. Y esta ves quiero que el articulo llegue a mis manos.

   Siempre me dice esto porque hubo una vez que debía hacer una entrevista con Lena Luthor, todo estuvo normal, pero cuando regresaba, hubo un problema en el DEO y perdí el artículo. Regresé a CATCO para escribirlo de nuevo, pero no me dio tiempo. Ahora, cada vez que tengo una entrevista con Lena, él me lo hace recordar. Pero en realidad, ya no me importa mucho. No sé cual es la razón, pero cada vez que tengo una entrevista con Lena siempre me pongo feliz. Al parecer hoy no será un día tan aburrido.

Narra Lena:

   Algunos creeran que ser yo es increíble. Tener todo L Corps en tus manos, ser multimillonaria y hacer lo que quieras. Pues no, creo que tengo la peor vida del mundo. Todos creen que soy malvada o haré algo mal solo porque mi apellido es Luthor. Además, no es tan fácil liderar una corporación que hizo que casi murieran millones de personas.

   Todos mis días son la misma rutina. Me levanto, voy a L Corps mientras docenas de personas me toman fotos para sus revistas estúpidas. Cuando llego, mi secretaria tonta me dice que hay varias personas importantes que me quieren ver y como siempre, yo las ignoro. Leo en Internet historias creadas de mi: Que planeo destruir el mundo, liberar a mi hermano de prisión de sus 35 cadenas perpetuas o traicionar a Supergirl, que por ahora tengo una buena relación con ella pues confía en mi.

   De pronto, alguien toco la puerta. Mierda me había olvidado que iba a venir Max Lord para hacer algunos propuestas para mejorar la tecnología de National City. Es decir, me importa mucho esta ciudad y quiero enseñarle a la gente que yo no soy como los Luthor. Trabajar con Max era una gran idea, porque a la mayoría de la gente le agrada Max Lord. Pero hoy, siento que me he despertado con el pie izquierdo, no quiero hacer nada ni ver a nadie. Me levanté de mi silla y camine hasta la puerta, la abrí y al otro lado estaba Max, siempre con su sonrisa de estúpido. Yo solo me digne a sonreírle.

   —Pasa—dije —Esta vez llegaste temprano

   —¿Por que dices eso? ¿Acaso te desperté? Si quieres me puedo ir y regresar dentro de una hora—dijo Max acercándose más a Lena.

   —¿Soy yo o estas tratando de conquistarme?— Pregunté mientras arqueaba una ceja—Yo tengo otro tipo de amores.

   Mi teléfono comenzó a sonar, fui a mi escritorio y contesté. Era mi asistente diciéndome que en unas horas vendría la reportera Danvers, de la empresa CATCO. Involuntariamente saqué una pequeña sonrisa de mi rostro. Al menos el día estaba siendo mejor.

«SuperCorp» Imagine You And MeTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon