«SuperCorp» Imagine You And Me

One Shoot

Amigos Lectores :v pues aquí les traigo el One Shoot que les prometí y que lo hice con mucho esfuerzo y dedicación. En realidad no, me acordé 3 días antes y por eso se lo traigo una semana tarde :v

Antes que lean quiero aclarar una cosa: Este One Shoot no tendrá nada que ver con mi historia. Osea aquí Lionel y Eliza no estaban ni en planes :v

Ah y una cosa más, quién más está triste porque mañana se termina Supergirl :"v y no tendremos nuevos episodios hasta octubre?

Pues ahora si, me despido :"v Adiós y disfruten la historia, porque me estuve exprimiendo el cerebro para esto :v

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Estamos a 200 metros de la ciudad. Lo único que se escucha es el pasto siendo pisado por mis zapatos blancos. Que estupidez ¿Cómo la gente puede usar estas cosas sin sentirse incomoda? Además de usar vestidos estúpidos. ¿Acaso voy a visitar a la reina? Y si lo hiciera, igual no lo usaría. Digamos que soy un conocido para el reina.

-Desde aquí hay una hermosa vista, príncipe- Dije mientras veía el cielo despejado.

-Por favor Karla. Ya te he dicho que no quiero nada de formalidades. Tú eres mi amiga- Dijo con una pequeña sonrisa.

-Claro, lo lamento Lex.

-Así me gusta- Me dio un pequeño golpe en el hombro-Y tienes razón, es una bonita vista.

Karla, que estúpido nombre. Extraño tanto que me digan por mi verdadero nombre.
Lamentablemente eso se acabó cuando pisé las tierras Luthor. La única ciudad en donde los Light pueden vivir en paz.

Les explico, existen dos ciudades: Las tierras de Luthor, la casa de los Light. Ellos protegen a los humanos desde el momento que el sol comience a salir. Y por otro lado están las Tierras de Zor-El, la casa de los Shadow. Hacen exactamente lo mismo, solo que en las horas más nocturnas.

Los nombres de estas dos ciudades se deben a sus creadores. La Reina Rhea y el Rey Jor-El. Dos hermanos completamente opuestos que han vivido por más de 5000 años. Estos dos hermanos no han hablado mucho de su pasado, pero hay algunas leyendas que dicen que eran humanos. Y un día se escaparon para recorrer las inmensas montañas que los rodeaban. Solo eran dos niños que tenían curiosidad. Pero comenzó a oscurecer y los hermanos no encontraban el camino de retorno.
Rhea puso la idea de dormir esa noche en alguna cueva y esperar a que sea de día para buscar algún camino a casa. Pero Jor-El no aceptaba su idea. Él sabía que en la noche, las cosas se ponían muy feas. No valía la pena. Jor-El creyó que su hermana era una cobarde así que él la dejo sola y comenzó a recorrer el lugar. Rhea se quedó en una cueva, esperando a que regrese su hermano con alguna respuesta positiva.

Pero, nunca regresó. El sol comenzó a aparecer y Rhea no podía quedarse con los brazos cruzados así que decidió salir y buscar a su hermano. Encontrándose con la terrible sorpresa de que su hermano estaba muerto. No había rastro de sangre, o huellas de algún animal. Asustada, comenzó a gritar por ayuda, pero nadie vino.

La hermana se acostó al lado del cuerpo, esperando a que se muera de hambre o frío. Pero cuando estaba a punto de dormirse, escuchó el pasto crujir. Se levantó rápidamente y cuando volteó se encontró con un gran hombre que llevaba una gran capa roja. Ella no logró ni parpadear, para cuando el hombre ya la había matado. Se supone que ese hombre es nuestro Dios, Rao. Es la razón por la que nosotros estamos aquí.

-Y ¿A qué se debe este pequeño paseo? - Me preguntó un poco intrigado.

- ¿No puedo caminar por los bellos prados de las Tierras de Luthor? Sin duda, a tu madre le encanta tener todo perfecto-Dije mientras le daba una miraba a todo el lugar.