Capítulo 42 - Pov Blake

109K 5.6K 5.8K
                                    

Instagram&Snapchat: LanaDvraux

Twitter: LanaDeveraux

Canción en multimedia: Edge — Gracie Abrams


Capítulo cuarenta — Fiestas y antigua "ex-novia" ღ (Pov BLAKE)


Alisson es más orgullosa de lo que podría haber imaginado. Las mallas que lleva son tan finas que no llega a estar cubierta. Su gabardina, negra y larga, tampoco es demasiado gruesa para el día que hace. Aun así se niega siquiera a abrazarse a sí misma por no querer demostrarme que tiene frío, no cuando antes de salir le he advertido del frío que haría y que con el vestido que lleva debajo, esa gabardina no sería suficiente para evitar que ella se congelara.

"No hace tanto frío" Había respondido ella. Claramente, se ha equivocado aunque se niegue a demostrarlo. Sabiendo que de acercarme ella sólo se echaría hacia el otro lado y que proponerle prestarle la chaqueta por tercera vez no cambiaría nada, busco marcar un paso rápido y que ella pueda seguir con los tacones para llegar lo antes posible a la puerta del local.

De reojo, puedo alcanzar a notar que está esforzándose para que el temblor de su cuerpo sea poco notorio. Está helada. Y, aun así, prefiere fingir que realmente no hacía "tanto frío".

Doy nuestros datos a uno de los seguratas de la puerta. Nos coloca el sello de la discoteca y una pulsera naranja a cada uno para entrar a la zona reservada. Alisson prácticamente echa a correr al interior. Sus tacones no son, sorprendentemente, problema para que ella suba las escaleras a una velocidad vertiginosa. Se adentra por el pasillo, obligándome a correr para volver a alcanzarla.

La música no tarda en llenar el pasillo donde luces de distintos tonos azules crean formas abstractas que guían el camino. No es la primera vez que se reserva una sala en este local, no es la primera vez que estoy y, al ver cómo Alisson trata de abrir la puerta principal me adelanto para sostener su mano, previendo la cantidad de gente que nos espera dentro.

— No te sueltes.

Ella entrecierra los ojos, desconfiada del gesto en alguna forma. Puedo preguntarle, puedo hacerlo si me apetece reescuchar ese "nada" cuando quiero saber si está todo bien. Al igual que en el coche. Primero había llegado a la conclusión de que ella venía sin ganas, sólo por haber sido convencida, pero sin querer realmente salir y que eso la tenía ligeramente molesta. Aun así, prefiero que venga, quiero que lo haga por mucho que pueda llegar a molestarse. Tiene que relacionarse más. Se mueve en un pequeño círculo y no sale de ahí, ni siquiera puede hablar de todo lo que quiere con todos. Puedo notar cómo ella llegaba a mirar con curiosidad a otros cadetes, sonriendo con disimulo al verles reír. Su mirada me mostraba el mismo anhelo que cuando me hablaba de su antiguo instituto o de sus dos mejores amigos. Alisson estaba acostumbrada a estar rodeada de gente, si quiero que se sienta más cómoda en el internado, que la estancia se le haga más llevadera y realmente lo sienta como un sitio cómodo para estar, necesita aumentar su círculo de amigos. Una fiesta puede llegar a ser la forma más fácil. Necesitaba que ella viniera aquí de una forma u otra porque no, no siempre vamos a poder estar ahí y no quiero que, cuando ese día llegue, ella no tenga a nadie que la distraiga de sus propios pensamientos, sobre todo al saber lo autodestructiva que puede volverse con ellos.

Finalmente, cierra sus dedos con lentitud sobre los míos, aceptando el gesto. Abro la puerta, la música aumentando de volumen en escasos segundos. El calor es prácticamente inmediato, y empiezo a hacerme un hueco entre las personas. Tengo cuidado de no pasar por el medio de grupos ni por zonas donde las personas que están tienen demasiados vasos en total. Lo peor de empezar la noche sería con la ropa llena de alcohol.

Internado MilitarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora