Capítulo 27 - "Lleva ese vestido rojo"

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-A propósito- me dijo después de un momento de estar viéndome a los ojos

-¿Cuándo le dirás a John que será tu pareja?-

-Mañana-

-¡Soy una mala persona!-

-¿Por qué lo dices?-

-John es mi amigo , no puedo odiarlo-

-Paul- me puse de frente a él, algo así como una psicóloga apunto de dar terapia a un pobre chico intoxicado. -¿Qué hizo John? ¿Por qué ya no son los mismos?-

Me miró por unos momentos.

-No puedo ser muy específico, pero te lo pondré como si estuviéramos apartados emocionalmente. Hay algo que nos incomoda el uno del otro, aún así cuando no nos hayamos dicho nada-

-¿Te manipula?-

-Una vez recibí una amenaza, típica de John. Pero esa vez fue la última-

-Ustedes me esconden muchas cosas- dije cabizbaja.

-Bonita…- me tomó de la mejilla -Tú eres la que esconda tantas cosas-

-Yo no escondo nada- reí

-Eso crees tú-

-¡Paul!- su padre abrió la puerta del cuarto -Te buscan…-

-¿Quién?-

-John-

-¡Voy a pasar señor McCartney!- la voz juguetona de John se escuchaba acercándose por el pasillo.

-¡No le digas que Alanna está aquí!- le dijo a su padre mientras se ponía de pie y me ponía de pie a mí. -Escóndete aquí- me llevó a un armario.

-Pero Paul…-

-Shhh-

-¿Qué tiene de malo?- le pregunté susurrando.

-Sólo quédate aquí- cerró la puerta y me quedé ahí entre un montón de ropa que no podía distinguir de tan oscuro que estaba. Me di cuenta que había un agujero en una orilla del armario… me moví discretamente y logré ver un poco por ese pequeño hoyo.

-¿Y qué te pasó a ti?- la voz gangosa de John irrumpió en el cuarto.

-Enfermé-

-Entonces, no podremos ensayar-

-Supongo que no-

Escuché que John sacaba una guitarra de su estuche y la comenzó a tocar.

-¿Qué te parece ésta melodía?-

-No tiene letra- Paul era muy cortante.

-No te la sabes… mira…- alcancé a ver que le entregaba una hoja

-¿”Dónde has estado toda mi vida”?-

-La canta Arthur Alexander, la escuché y quise hacerla parte de nuestro repertorio-

-Pensé que la habías escrito tú- Paul le devolvió la hoja.

-La hoja es tuya… ensáyala-

-Es bonita- Paul volvió a leer la letra.

-Es más bonita la persona a la que va dedicada-

Al escuchar a John decir eso sentí algo en mi estómago.

-¿A quién se la dedicas?- escuché que Paul le preguntó con una voz mas baja.

-A la persona en la que he estado pensando mucho-

Piénsalo, dos veces. (John Lennon & Paul McCartney)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora