parte39Lars Ulrich

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Estaba sentada en una cafetería, con un té de menta frente a mí mientras yo tomaba un café con leche y un sobre de azúcar.

-¿Está ocupado?- preguntó un chico con ojos de color verde oscuro y el pelo largo.

-Si se retrasa unos minutos más dejará de estarlo.- gruñí dando otro sorbo a mi bebida, la cafeína no me estaba ayudando.

-Si es tan idiota como para no venir... llámame.- su sonrisa brilló cálida unos segundos y después se fue a la barra.

No pude parar de mirarle, ¿le habría visto antes? Quizá en alguna fiesta.

Actuaba de forma normal hasta que se sentó en el taburete y con dos tenedores, creó un ritmo perfecto entre platos y madera.

Ahí fue cuando le recordé, le había visto en una de las fiestas de la banda, iba con James Hetfield.

-¿Así es cómo intentas impresionarme, Lars?- me senté a su lado.

-Ha funcionado, ni siquiera me habrías mirado.- rió y señaló mi taza.- ¿Te invito a otro?

-Prefiero algo más fuerte.- miré su vaso de whisky, era todavía temprano para empezar a beber.

-Voy a tener que ver tu carnet, no quiero comprarle alcohol a una menor.- el camarero levantó una ceja y yo le di un golpe en el hombro al batería.

-Solo está bromeando...- dije entre dientes al enseñar mi carnet, obviamente era mayor de edad.

- Ahora que estoy seguro de que no es ilegal... ¿me das tu número de teléfono?- ya tenía bastantes problemas, pero se lo había ganado.

-¿Tienes un boli?- el camarero me pasó uno y cuando había escrito hasta el quinto dígito, me interrumpieron una oleada de gritos.

En el siguiente capítulo...
Descubriremos qué produce esos gritos y si Becca consigue contactar con Lars más adelante.

Próximamente
Parte40Manada de gunners salvajes.

 Guns N Roses. La Debacle.Where stories live. Discover now