[27] De un capítulo final llamado Kingdom On Tour

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Luka era como un niño atrapado en el cuerpo de un chico de 1'90.

Después de su repentina llegada a mi apartamento, fue reprendido y advertido por uno de los representantes de Kindest Managment que le obligó a volver por la mañana a Melbourne después de suspender el concierto de esa noche.

Pero se fue más calmado, más tranquilo o eso parecía.

Todas las noches me llamaba por FaceTime para que fuese su ancla y su lugar seguro, todas las noches a la misma hora.

Una semana más tarde, todos se encontraban en Sídney para el cierre de la gira, el último concierto para cerrar el ciclo de Kingdom On Tour y darle paso al siguiente álbum, en el que ya estaban trabajando desde inicios de la gira.

Ellos no descansaban y eso tarde o temprano les afectaría. A Luka ya estaba afectándole, y mucho. Por eso detestaba a los de su equipo de managers y representantes que no ponían su bienestar y salud como prioridad.

Y no solo eso, sino que, además, estaban grabando un documenta, cosa de lo que me enteré por Sally hace un día. Me molestaba que apenas y les dejaran respirar con esfuerzo, me frustraba y lo peor es que no había nada que yo pudiera hacer.

Lottie, Sally y yo llegamos juntas a la prueba de sonido de los chicos, donde algunas fanáticas estaban presenciando el momento. Afuera del estadio había montones, montones y cientos de fanáticas esperando a que fuese la hora del concierto. Por suerte pasamos en un auto al estacionamiento dentro del estadio y nuestros pases vips nos dieron la ventaja y el privilegio de no juntarnos con las fanáticas.

Había una chica que llamó mi atención por el color que llevaba en las puntas de su cabello, el degradado a rosa; era la telonera de ellos, Shelly Rox. Le hice seña a Lottie y ella la miró de pies a cabeza para después hacer una descuidada mueca de desaprobación.

—Pensé que solo seria telonera de los chicos en Europa —pronunció.

—Tuvo tan buena recepción y recibimiento que se extendió —dijo Sally.

—¿Y tú como sabes eso?

—Zachy me lo dijo —respondió la pregunta de Lottie—, iré al frente ¿vienen?

—Después te alcanzo —musito Lotts. Yo tenía mis ojos fijos en la pelirrosa que hablaba por teléfono con su mano libre metida dentro del bolsillo de su pantalón militar camuflajeado.

Se veía bien, no iba a negarlo. Su cabello con rizos y el color llamativo de las puntas, tenía estilo fresco y casual, vistiendo esos pantalones y una camiseta top Adidas que dejaba ver su abdomen plano. Era delgada, delgada y de cintura pequeña, ella se pasó una mano por el cabello, murmurando algo al teléfono y dejé de verla porque me sentí como una acosadora.

Me removí un poco sin saber muy bien que hacer o a donde ir, antes hubiera paseado libremente por el lugar e ido hacia los chicos para unirme como una más de ellos, pero en realidad no me sentía tan en confianza conmigo misma para ir a comerme el mundo y ser yo misma.

Podía escuchar sus voces cantando armoniosamente, tocaba So Sweet, el solo de guitarra de Zach era increíble. Esbocé una pequeña sonrisa, con la letra de la canción cruzando mi cabeza. Suspiré. Era la ultima estrofa de la canción que cerraba con un ritmo movido de la batería.

Lottie enrolló su brazo con el mío y me hizo caminar. Nos acercamos a un lado del escenario y los vi, los vi a todos. Asher estaba levantándose de la batería, Caleb vestía shorts y camiseta deportiva junto a una gorra negra hacia atrás, muy deportivo y fresco. Las fanáticas les grababan y Luka estaba al centro, con ambas manos en el micrófono y la guitarra hacia atrás.

Padres Inexpertos©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora