I Kissed Him. Larry/Ziam.

01-"Lleno de golpes".

Holu:B

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1

+++++HARRY+++++

—Jo-der —silabeó Zayn al ver pasar por delante de nosotros a una chica bastante atractiva.

—Maldición, mira que trasero —relamí mis labios.

Los dos nos inclinamos hacía adelante a la vez, para observar mejor aquel gran y redondo culo. La chica lo tenía bien levantado, eso me gustaba. Nos miramos y asentimos. Tomamos aire y, antes de seguirla, gritamos a la vez:

—¡Me la pido!

Corrimos al lado de aquella chica, la cual nos miró sonrojándose y desvió su camino de nosotros. Con lo buena que estaba. Zayn lloriqueó.

—Estará en mi cama algún día —afirmó.

—Veremos —palmeé su hombro.

Entramos a clase hablando de cualquier cosa. Nos sentamos, como siempre, en los últimos asientos de aquella pequeña sala. Esta clase me aburría. Bueno, como todas las otras. Era más divertido estar en los baños con cualquier chica. Zayn resopló. Él prefería estar fumando a estar aquí.

Habíamos sido los terminales en entrar a la clase. O eso pensé yo. Porque la puerta se volvió a abrir. Miré la hora en el gran reloj de la clase, habían pasado casi quince minutos desde las ocho, hora de comienzo de las clases y después de que entrabamos Zayn o yo, no entraba nadie. Eso significaba alguien nuevo o algún llamamiento del director.

Ahora observé hacia la puerta, dónde un chico aguantaba unos libros pegados a su pecho. Pestañeó mirando a la profesora. Tomó aire y caminó hacia la mesa del centro de aquella sala. Se posicionó al lado de la maestra, miró al suelo y después habló algo con ella. Con una sonrisa, la vieja aquella asintió.

—Chicos, este es Louis Tomlinson. Es nuevo en el centro, espero que lo acojan bien —informó.

Nadie se molestó en responder, pero si en cuchichear sobre el nuevo. Mientras iba hacia su sitio, contemplé unos leves morados en su ojo y mejilla derecha. También presencié como alguien le puso la zancadilla y el muchacho acabó en el suelo. Pensé en reírme, pero esos golpes en su rostro me hicieron pensar que no era lo mejor.

—¿Qué haces? —murmuró Zayn, apagando su risa, al verme levantarme.

Me acerqué al chico, me agaché y lo ayudé a levantarse. Ante la atenta mirada de la clase, le pregunté.

—¿Te encuentras bien?

Él me miró curioso y tímido. Sus mejillas se enrojecieron, pero solo el sonrojo se notó en la izquierda pues la otra estaba morada. Asintió levemente y miró a sus pies.

—Gracias —susurró tan bajo que casi ni lo oí.

—No te acostumbres —elevé mis hombros.